Todos los grupos municipales acordaron en abril una serie de medidas extraordinarias de apoyo económico, fiscal y de contratación a empresas, familias y personas en situación de vulnerabilidad como consecuencia de la crisis de la covid-19, entre ellas destinar 500.000 euros para contratar temporalmente por el Ayuntamiento y de manera directa a trabajadores en situación de desempleo.

Para lograr este objetivo la administración local se ha puesto en contacto con la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE) para diseñar un plan de empleo piloto destinado al mantenimiento de los polígonos industriales de la ciudad. La sección de Vías Públicas y Obras municipal está realizando el estudio de necesidades, que son muchas. No se trataría de grandes obras de asfaltado sino de labores de mantenimiento viario o de zonas verdes o limpieza. «El trabajo que realizarían las personas que se contrataran estaría supervisado por los técnicos de la Brigada de Obras», aseguró el concejal de este área, Adolfo Díez. 

Por el momento, las actuaciones están por definir pero se determinará en función de las más urgentes y teniendo en cuenta el montante económico. «Esperamos tener definidas las necesidades lo antes posible porque se nos echa el tiempo encima y debe hacerse antes de que concluya el año», añadió el concejal.

La secretaria general de FAE, Emiliana Molero, celebra esta iniciativa y avanza que iniciarán los trabajos por el polígono industrial de Burgos Este, sin duda uno de los más deteriorados. La cuadrilla trabajará durante medio año según indica y recuerda la enorme necesidad de atención que requiere esta zona industrial, donde operan algunas de las principales fábricas y compañías de la ciudad como Gonvarri, Campofrío, San Miguel, Ferroli, Verallia, Smurfit Kappa o Pepsico.

Una vieja reivindicación. Hace unas semanas el presidente del polígono Burgos Este, Fernando de Santiago, denunciaba en las páginas de este periódico el «vergonzoso» estado de las calles y viarios del mismo. Es un hecho que la vegetación se ha adueñado casi por completo de las aceras, especialmente en las vías colindantes al eje principal, Alcalde Martín Cobos. Es precisamente el arreglo del tramo final de esta una de las principales reivindicaciones que trasladan al Ayuntamiento.

El anterior Gobierno municipal del PP acordó con el PSOE el asfaltado completo de esta vía, pero aún queda pendiente la última fase, desde el puente sobre el ferrocarril y la carretera de Logroño (incluida la rotonda de la Ventilla). «Está comprometido en su día y siguen sin ejecutarlo», denuncia Fernando De Santiago. Se trata de una actuación que precisará de una inversión que se acercará a los dos millones de euros.

«Con la cantidad de impuestos que pagamos los empresarios es increíble que no consigamos una atención mínima de toda esa zona. Es una vergüenza», denuncia De Santiago, que se muestra muy enfadado con la actitud del Ayuntamiento de cara a los burgaleses que trabajan en este espacio de la ciudad. «Seguimos completamente indignados con el tratamiento que estamos recibiendo», indica. 

Para el presidente, el Ayuntamiento debería de «invertir al menos 2 millones de euros al año» en este rincón de la ciudad ya que el Consistorio, según apunta, recauda vía impuestos cada ejercicio entre 10 y 12 millones de los centenares de empresas que operan allí.