Medina se reinventa para atraer turismo

A.C.
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La concejal del área, Nerea Angulo, califica de «muy positivo» el año en que todo tuvo que adaptarse a las limitaciones de la covid

Uno de los bancos de la iniciativa ‘Fotografía-T’ que invita a tomar las mejores vistas de la ciudad y promociona su nombre. - Foto: DB

El turismo, uno de los sectores sobre los que Medina de Pomar asienta buena parte de su economía, ha sido muy diferente en este 2020 que acaba, pero «ha merecido la pena», como afirma la responsable municipal de este área, Nerea Angulo, quien no ha parado de innovar y de trabajar por potenciar la llegada de visitantes. Y lo sigue haciendo con ideas como los nuevos bancos de la iniciativa ‘Fotografía-T’, uno ya ubicado en el camino al puente romano, desde donde sacar una panorámica del casco histórico, y otro que en breve invitará a fotografiar la plaza Mayor desde el balcón de la calle Santa Cruz.

La pandemia echó por la borda meses en los que se esperaba la llegada de miles de visitantes, pero el 16 de junio la Oficina de Turismo y el Museo Histórico de las Merindades, el buque insignia del turismo de la ciudad, pudieron reabrir sus puertas con todas las medidas de seguridad a su alcance. Esta vuelta fue acompañada por el lanzamiento de los vídeos promocionales de la ciudad bajo los títulos de ‘Empezar’, ‘Volver’, ‘Sentir. Angulo no tiene dudas. «Que más de 16.000 personas hayan visto los videos en redes sociales ha sido un logro y un resultado muchísimo mejor de lo esperado». La campaña trató de tocar la fibra sensible de quienes ya visitan Medina cada vez que tienen vacaciones y no habían podido pisar sus calles en meses, a la vez que buscaba atraer visitantes nuevos. Junto a ella, las concejalías de Turismo y Cultura se pusieron manos a la obra para sumar atractivos a los que ya atesora la ciudad.

Además de ello, Medina creó cuenta en Instagram @medinade pomar_ turismo y ya suma 560 seguidores, con lo que ha zanjado un asunto «pendiente», como recuerda Angulo. El empujón de la campaña de Reveraneo, que lanzó @on.tourists ayudó a promocionar más aún Medina en esta red social y llegar a un público joven.

Las exposiciones previstas para el verano tuvieron que cancelarse y organizarse nuevas propuestas, como la protagonizada por las obras en madera y alabastro de Carlos Armiño, que abrió sus puertas el 17 de julio. Hubo que repensar la programación y se apostó por propuestas al aire libre, como el autocine o las rutas guiadas de senderismo y de ornitología, así como por una Noche en Blanco unida al patrimonio y con grupos muy reducidos. Al final del verano, 1.400 personas habían participado de estas iniciativas y Medina mantuvo vivo el pulso con sus visitantes. También se buscó que «los propios medineses y medinesas pudieran sentirse  ‘turistas’ en su ciudad que todas las actividades que hiciéramos estuvieran enfocadas tanto para los de fuera como para los de casa», rememora la edil.

Julio y agosto se saldaron con 7.200 turistas contabilizados en el Museo Histórico y la unificada Oficina de Turismo de la ciudad, 800 menos que en el mismo periodo de 2019, pero crecieron los llegados de lejos y que pernoctan. Los madrileños alcanzaron el 20% frente al 13% del año anterior. Eso significa que casi 1.500 turistas llegaron de la capital de España. Para la edil de Turismo, la valoración de estas cifras es «muy positiva» y «el esfuerzo ha merecido la pena».

 Otro de los grandes cambios del año ha sido el estreno de una sola Oficina de Turismo, que aglutina la antigua Oficina de Turismo Municipal y la que el Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) de Las Merindades tenía operativa unos números más abajo, también en la calle Mayor. Unificarlas era una idea «personal» que Nerea Angulo manejaba desde que llegó al equipo de gobierno. Lo logró creando un espacio «amplio, moderno y funcional», por el que en julio y agosto pasaron 2.400 personas.