El Dakar en Arabia Saudí se está revelando como una carrera durísima en la que cada nuevo día plantea un reto tan arduo o más que el anterior a los pilotos. La llegada a Al Ula ha venido precedida de una especial durísima, con mucha arena y piedras y una parte final en una trialera absolutamente demoledora que, sin embargo, no ha detenido el avance de Cristina Gutiérrez, que ha culminado la cuarta etapa en una meritoria 34ª posición de la clasificación general absoluta y en la 8ª entre los T1 4x4 mejorados. 

Conforme la carrera comienza a tomar rumbo sureste, la arena va ganando aún más protagonismo, aunque en la jornada de este miércoles aún había que franquear numerosos pasos rocosos, como los de la cordillera de Mogayra, que aún tendrán continuidad durante dos etapas más. La cuarta etapa del rally tenía su destino a unos 20 kilómetros al sur de Al Ula, en la región de Tabuk, que ha recibido a los participantes con unas temperaturas mucho más bajas, propias del área centro-norte del país.

De nuevo arena y piedras eran la constante de una prueba especial donde la navegación también tenía su complejidad, aunque la vuelta a la entrega de libros de ruta en la tarde anterior por parte de los organizadores ha hecho más llevadera la vida a los copilotos.

Partiendo desde muy atrás por el problema de potencia de su Mitsubishi Eclipse Cross en la jornada de ayer, Cristina Gutiérrez, junto a su copiloto Pablo Huete, ha tirado de determinación y ha adelantado a no menos de veinte coches, consciente de que valía la pena asumir ciertos riesgos con tal de conseguir salir en una posición más adelantada en la jornada de este jueves.

"La jornada de hoy ha estado muy bien, salvo la última parte, después de la última neutralización. Los últimos cien kilómetros han sido una auténtica locura, nos hemos encontrado con piedras enormes, todo trialeras, y ha coincidido con que justo yo no me encontraba muy bien", explicaba Gutiérrez nada más cruzar la meta, ya de noche. "Ha sido un poco complicado, además hemos pinchado dos veces, pero el coche se ha comportado bien. Nos falta un poco de potencia todavía pero vamos por el buen camino", aseguraba la piloto burgalesa, satisfecha porque "el coche está de una pieza".

La carrera alcanza Ha'il este jueves, con un menú compuesto por 563 kilómetros en total, que incluyen una especial de 353 kilómetros.