Idas y venidas continuas las vividas en el día de ayer viernes en relación a la situación de la Arandina por jugar definitivamente, o no, el playoff de ascenso a 2ªRFEF. Primero de todo, por hacerse oficial, ya sí, la exclusión por parte de la RFEF del Numancia B de dicha fase. Hecho éste además, que permitiría al primer clasificado del Grupo D, o intermedio, promocionar para ser anfitrión del partido de cuartos de final en dichas eliminatorias. Segundo, porque a lo largo de la jornada, la entidad de El Montecillo se encontraba, de forma inesperada, con varios apoyos económicos favorables a su participación en el sector.

Uno de ellos público, el correspondiente al desbloqueo de algo más de 5.000 euros por parte del Ayuntamiento en concepto de abono del 10% restante del importe total del convenio del ejercicio 2019 (y que aún no se habría cobrado por un defecto de forma de la Administración), y otro de ellos, el del Club Aranda Riber, privado.

Precisamente éste último se habría concretado a última hora de ayer y tras reunirse en junta directiva la cúpula de la entidad celeste. Un escenario tras el que no habría trascendido cifra alguna de manera oficial (aunque podría ser igual o superior a la del Ayuntamiento), porque la intención sería la de hablar con la Arandina para preguntar qué necesita exactamente, pero que según fuentes de la propia entidad llegaría, sí o sí, para ayudar a que la ciudad «no se quede sin playoff».

Eso como nota positiva al asunto puesto que, tras completar también ayer viernes una última reunión entre directiva y plantilla, la expectativa transmitida a DB por el propio club no ha resultado ser tan halagüeña. Así lo han corroborado declaraciones que vendrían a confirmar que la situación sigue enrocada en el mismo punto en que se estaba anteriormente. Esto es, con el vestuario habiendo decidido «no renunciar a ninguna de las cantidades que se les adeuda», ni aceptando «jugar en ninguno de los casos sin cobrar» a pesar de «la súplica de la directiva de que accediesen a renunciar solamente a la parte de salarios correspondientes al período de playoff». Algo, legítimo por su parte, pero que mantendría al club, ahora mismo, al límite de la renuncia a la fase.

Eso sí, una fase que llegaría siempre tras la celebración del encuentro que la Arandina debe disputar mañana en casa ante La Virgen (18.00h. en horario unificado), y que según Álex Izquierdo se antojará «diferente» al visto en Los Dominicos tanto por el cambio de terreno de juego, como porque «la diferencia real entre ambos clubes no es tanta como pareció verse en el resultado del partido de ida».