La exigencia del certificado COVID para acceder a restaurantes y otros lugares de ocio cobra fuerza y tanto Aragón como País Vasco, que lo han solicitado, están a la espera de que decida la Justicia, en tanto que Navarra preguntará a los tribunales la próxima semana y en Galicia, los hospitales podrán requerirlo a las visitas de los enfermos.

Ha sido el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) el que ha autorizado a la Xunta exigir el pasaporte COVID para el acceso a los hospitales públicos y privados de la comunidad a las visitas y acompañantes, mayores de 12 años, de los pacientes ingresados.

Una medida que entrará en vigor desde las 00:00 horas del día siguiente al de su publicación en el Diario Oficial de Galicia (DOG) y hasta las 00:00 horas del 4 de diciembre, y cumple, según los magistrados, "la función de evitar contagios y de minimizar los riesgos".

En esta comunidad autónoma ya es obligatorio presentar el certificado COVID en el ocio nocturno, en los albergues de peregrinos y el gobierno gallego pondera volver a pedirlo para acceder a la hostelería y los eventos masivos en interiores.

Y Aragón ya ha solicitado al Tribunal Superior de Justicia de la comunidad (TSJA) autorización para poder solicitar el certificado para ir a espectáculos y locales de ocio nocturno, ya que la región ha entrado en la séptima ola de la pandemia.

En el caso de que el TSJ no dé luz verde, la consejera aragonesa de Sanidad, Sira Repollés, ha asegurado que buscará todas las herramientas legales que permitan exigir ese certificado.

Este tribunal cuenta con tres días para pronunciarse y si lo autoriza, el Gobierno de Aragón publicará la orden y esta entrará en vigor en un plazo de 24 horas, cuando sería obligatorio el certificado para el acceso a establecimientos, espectáculos y actividades, es decir, celebraciones, ocio nocturno y cualquier evento que reúna a más de 500 personas en el interior y 1.000 en el exterior.

Será la próxima semana cuando el Gobierno de Navarra propondrá al TSJ la aplicación del certificado, que funcionaría desde el 27 de noviembre en espacios y supuestos determinados, como restaurantes y locales de ocio nocturno y eventos multitudinarios con consumición.

En concreto, si cuenta con el aval de la justicia, se exigiría en los restaurantes y recintos donde se ofrezca servicio de restauración con un aforo superior a los 50 comensales, discotecas y salas de fiesta, establecimientos con licencia de café-espectáculo y bares con licencia especial. En estos últimos, se pedirá a partir de las 00:00 horas.

Y el documento también se comprobaría en eventos multitudinarios con consumición de comida o bebida celebrados en espacios interiores.

Por su parte, la Fiscalía vasca considera que procede la autorización que ha pedido el Gobierno Vasco a la Justicia para poder exigir el certificado en determinadas actividades en Euskadi.

La Fiscalía mantiene esta postura en un informe que ha elaborado, dirigido a la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), que el lunes tomará una decisión sobre la autorización solicitada por el gobierno de esa comunidad para poder exigir el documento en el ocio nocturno y restaurantes con comedores para más de 50 personas.

El Ejecutivo vasco presentó ayer ante el alto tribunal la petición de autorización judicial, en un escrito en el que argumenta que la exigencia del pasaporte COVID contribuirá a atajar una nueva ola de transmisión e incentivará "aún más si cabe" la vacunación.

En Barcelona, la Agencia de Salud Pública de Barcelona estudiará con el Departamento de Salud dónde será necesario el pasaporte COVID si la consellería decide finalmente implantarlo.