No hay nada más atractivo y divertido para ir despidiéndose del verano que ponerse encima una toga, tocarse la cabeza con una corona de laurel y calzarse las sandalias más ajadas del fondo del armario. Éstas eran las prendas mínimas para formar parte ayer del elenco de actores de una ‘peli’ de romanos con la que Sasamón honró, por segundo año consecutivo, su rico pasado histórico. Pero muchos vecinos no se conformaron con improvisar un atuendo para la ocasión sino que han pasado semanas diseñando y confeccionando sus atavíos para engalanar un pueblo que por un fin de semana volvió a llamarse Segisama Julia, aquel castro que en el siglo IV antes de Cristo fue ocupado por las legiones del emperador Octavio Augusto para combatir desde el sur a astures y cántabros.
Es el segundo año que se organiza la recreación histórica y cada vez son más los vecinos -y también foráneos- que se animan a participar de forma activa de la fiesta. Mayores, jóvenes y niños que, salvo hablar latín, adoptan durante dos días todas las costumbres romanas. «La verdad es que está genial y este año nos lo hemos currado, nos hemos hecho los trajes y, por el momento, es todo muy divertido», comentaba ayer por la mañana María, una vecina del pueblo que viste con una toga de un blanco inmaculado que se ciñe a su cintura con cordón dorado.
A las 11 de la mañana de ayer todo estaba preparado para que diera comienzo la ‘bacanal’. Estandartes granates decoraban los balcones de la Plaza Mayor, escenario principal de la ‘película’. Para ese momento ya había abierto al público el mercado romano, donde varios comerciantes vendían sus quesos, chorizos, abalorios y aguardientes, por que en Roma el comercio también era esencial para la economía.
Mientras, a las puertas de la ciudad, más allá de la muralla, acampaban, por poco tiempo, los soldados de la Legio IV Macedónica, con el cónsul Aelius Maritimus a la cabeza. Tras el encuentro con los pobladores de Segisama en el hito romano del puente de Trisla -y de resolver un pequeño contratiempo por la huida de varios caballos- la legión dio entrada en la Plaza Mayor, desde la carretera de Villasidro y tras atravesar la muralla y pasar por la calle Cardenal.
Allí, sobre una tarima ubicada junto al patio exterior de la Iglesia de Santa María La Real, el cónsul Aelius Maritimus saludó a los habitantes del pueblo y los animó a participar de la fiesta. Daba comienzo un fin de semana lleno de actividades para mayores y pequeños. En el campamento levantado frente a la parroquia un grupo de recreación de legionarios propuso talleres para enseñar a elaborar mosaicos, para explicar el papel de la mujer romana en aquella época o para representar ritos de magia negra.
Por la tarde, el claustro de la iglesia acogió el acto de bendición del águila y estandarte de la legión por las vestales, así como el juramento de los nuevos legionarios en el Templo de Vesta, en centro de interpretación del Medievo, una exposición abierta al público en el interior del templo. Y al final de la jornada, los actores aficionados, muchos de ellos integrantes de la Asociación Recreativa, Cultural y Deportiva Segisama, escenificaron el encuentro del jefe cántabro Cocorotta y Aelius, cuyo funeral también se celebró ayer.
El alcalde de la localidad, Amando Calzada, pasó la mañana corrigiendo algún detalle de última hora y, pese a los nervios de los primeros momentos, se mostró contento y orgulloso por «el esfuerzo» de los vecinos en «poner guapo» el pueblo para la ocasión. «El año pasado, el primero, ya fue bueno, pero en éste esperamos que haya aún más gente porque está mejor preparado», comentó, si bien advirtió de que «habrá que esperar hasta el final para hacer una valoración».
Lo cierto es que Calzada ya están pensando en la próxima edición, pues quiere darle otro aire a esta fiesta, «potenciarla aún más». Para lo cual ya ha hablado con el vicepresidente de la Diputación, Lorenzo Rodríguez, que acudió a Sasamón. «Iniciativas como ésta han de repetirse con el fin de potenciar toda esta comarca, por ejemplo con la Via Aquitania, que pese a no estar abierta aún ya tiene visitantes», indica. Y es que la aplicación (app) de móvil para moverse por esta ruta ya está activa. El regidor municipal espera que muchos peregrinos del Camino Francés visiten la Via Aquitania, «facilitándoles los desplazamientos», con el fin de dar a conocer toda la zona.