BBVA Research ha pronosticado esta mañana en Burgos que la economía de la región crecerá en 2019 un 2,3% en términos de PIB y que en 2020 lo hará a un ritmo del 1,9%. Aunque para este ejercicio la evolución presenta una mejoría de una décima respecto a 2018, el economista jefe para España de la entidad, Miguel Cardoso, ha aclarado que la recuperación entró en una fase de ralentización en 2017 que se mantendrá durante el próximo bienio.

Cardoso ha estimado que en los próximos dos años se crearán en Castilla y León 35.000 empleados, lo que dejará la tasa de desempleo en el 8%. Es decir, en índices muy similares a los momentos inmediatamente anteriores a la crisis económica.

En relación a  Burgos, el experto de la entidad financiera ha afirmado que que previsiblemete la recuperación en la provincia burgalesa "será más intesa que en el conjunto de Castilla y León" y lo argumentado en que as cifras tanto de desempleo como de afiliación a la Seguridad Social presentan unos mejores índices que en la región. En este sentido ha apuntado como causa de esta fortaleza el peso de la industria y lo ha puesto en contraste con otros territorios como Valladolid, más vinculado a la evolución del sector público.

Entre las razones que apoyan el crecimiento económico en España y en Castilla y León ha destacado el contexto de recuperación mundial, los bajos tipos de interés, la caída de los precios del petróleo. Por el contrario, ha destacado en el lado de las incertidumbres las tensiones comerciales, el Brexit, las dudas sobre el crecimiento de Estados Unidos y China y sobre la política monetaria y a nivel interno las provocadas por la no aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, por las elecciones y que porque estas circunstancias no aclaren las posiciones de la política económica