Una vez analizado cómo transcurrió el primer día del mercadillo de frutas y verduras, la Concejalía de Comercio ha decidido adelantar una hora su apertura, de tal forma que a partir de este sábado se podrá acceder por la calle Manuel Altolaguirre a partir de las 9.30 de la mañana, mientras que el cierre al público se mantiene a las dos de la tarde. Así lo confirmó la responsable de este departamento, Dolores Ovejero, quien calificó la reapertura como una jornada de «prueba» debido a los «muchos cambios» que han tenido que hacerse para adaptarse a las nuevas exigencias sanitarias.
Con esta modificación del horario, el Ayuntamiento trata de evitar que se repitan las colas del miércoles. «Creemos que así se desarrollará mejor», aseguró la edil, quien avanzó que se estudiarán «todas las incidencias» que se hayan podido dar, si bien por el momento no prevé ninguna otra variación. «Nos adaptaremos a las circunstancias y se irá viendo», señaló, al tiempo que destacó la «buena distribución de los puestos» porque resulta la «mejor forma de optimizar el espacio».
Ovejero subrayó que hay que tener en cuenta las restricciones existentes y que en este momento «la seguridad es lo más importante», además de recordar que ha sido necesario «reajustar» los 5.000 metros de espacio para que puedan instalarse todos productores. En este sentido, explicó que a primera hora de la mañana ha habido que decir a cada comerciante el puesto signado, «por lo que se ha tardado un poco más en realizar el montaje». Respecto a que solo hayan acudido 26 vendedores de los 44 autorizados, cree que puede deberse a varias razones, como proceder de otras provincias, y abogó por esperar la respuesta hasta que la situación excepcional se normalice.
Los productores lo justificaron también en que en algunos casos «dos metros para vender es poco», afirmó José Luis Gómez portavoz del colectivo, quien también hizo referencia a otras carencias existentes como el hecho de no disponer de aseos en el aparcamiento, teniendo en cuenta que los bares aún están cerrados.
Gómez valoró positivamente el primer día de trabajo, a pesar de estima que la apertura debe adelantarse aún más, y la «predisposición» del Ayuntamiento: «No ha habido ningún problema. La atención al público ha sido buena, respetando todas las medidas establecidas y sin que ningún cliente se haya quejado por eso».