La Guardia Civil ha detenido en Las Merindades a J.M.R.A., de 53 años de edad, como presunto autor de un delito de acoso sexual en el ámbito laboral. La víctima ha sido una mujer de 56 años que a primeros de este mes fue contratada como empleada de hogar y como cuidadora de una mujer de avanzada edad, la madre del detenido. Desde el primer día, según refleja la denuncia, el hijo de esta señora empezó a insinuarse, acosándola con solicitudes de favores sexuales e incluso realizando tocamientos en su espalda no consentidos. 

La denunciante le pidió reiteradamente que cesara en su comportamiento, si bien éste hizo caso omiso, insistiendo en días sucesivos y siempre en el interior de la vivienda durante su jornada de trabajo. Como consecuencia de esta actitud, la víctima sufrió una crisis de ansiedad de la que fue tratada en un centro sanitario a la que se vio obligada a acudir.

Una vez tuvo conocimiento la Guardia Civil de los hechos denunciados, inició el protocolo dictado para víctimas de acoso sexual, localizando en poco tiempo al presunto autor que fue detenido en dependencias oficiales del Cuerpo. Las diligencias instruidas han sido entregadas en los Juzgados de Instrucción de Villarcayo.

La Guardia Civil recomienda que este tipo de conductas coercitivas y totalmente reprobables, que van contra la libertad sexual de las personas, indistintamente del ámbito en que se produzcan (laboral, personal, doméstico, familiar…) sean denunciadas desde el primer instante. "No se deben consentir dichas actitudes evitando posibles agresiones posteriores sobre otras mujeres, dejando claro nuestra postura; no acceder a ninguna solicitud o favor sexual, menos bajo chantajes, amenazas ni coacciones, poniéndolo en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", añaden desde la Comandancia.

La Guardia Civil aborda la problemática relacionada con los colectivos más vulnerables implicando tanto a las Unidades de seguridad ciudadana, como a las compuestas por agentes especializados en atención y protección de las víctimas. La protección de los colectivos más vulnerables debe afrontarse de manera integral, por ello la Guardia Civil trabaja de manera coordinada con el resto de instituciones públicas y privadas y con otros cuerpos policiales nacionales o internacionales en la asistencia y protección de mujeres, menores, personas mayores, víctimas, inmigrantes...