Durante el recién estrenado mes de agosto, la provincia se convierte en una mezcla de tradición, cultura e historia. Muchos de los 371 municipios burgaleses celebran sus fiestas, marco en el que se desarrollan acontecimientos importantes de la historia ligados a dichos festejos.

El número de representaciones de este tipo en el territorio es 26, unas muy conocidas incluso a nivel nacional, como es el caso del Cronicón de Oña. Por ello, no es de extrañar que muchos viajeros se acerquen para conocer de cerca nuestras raíces y disfrutar del espectáculo.

Este tipo de actuaciones tienen sus orígenes en 1960 ya que tras las conmemoraciones por el centenario de la Guerra Civil americana se expandieron rápidamente por Europa. En el caso de Burgos, las recreaciones históricas comenzaron en la época de los 80 aunque no han parado de incrementarse a medida que iba pasando el tiempo. Cabe destacar que 5 de éstas han sido declaradas como Fiestas de Interés Regional y junto con otras 8 de distintas categorías, hacen que la provincia de Burgos sea la que más posea de toda la Comunidad Autónoma con 13. Le siguen León y Valladolid, ambas con 11, tal y como recoge un informe dado a conocer durante el primer encuentro provincial de recreaciones históricas. La Batalla de Atapuerca aspira a conseguir la consideración de Fiesta de Interés Regional tras diecinueve ediciones y con la vigésima a la vuelta de la esquina.

Los responsables principales de estas caracterizaciones son los propios vecinos. Son los encargados de teatralizar dichos acontecimientos, crear los decorados y el guión. Pero no todo es teatro, pues también se recrean formas de vida de la época que se trata.

Propuesta.

Desde la Asociación Cultural Amigos de Atapuerca ha puesto en marcha la creación de la Federación de Recreaciones Históricas de Castilla y León. Ignacio Martínez Alfaro, de la misma asociación, afirma que «se coordinen, potencien y mejoren las recreaciones que se realizan en la comunidad».  

Para inscribirse en la federación hay que cumplir una serie de requisitos: ser una representación histórica, que sea en la comunidad y que sea respaldada por una asociación sin ánimo de lucro. Se puede obtener más información a través del correo electrónico info@recreacioneshistoricas.com y del teléfono 947 225 471.

Fiesta Romana

En Baños de Valdearados se celebra el cuarto fin de semana  de agosto dicha fiesta que recrea la época romana desde las vestimentas hasta el ambiente de la ciudad. Todo el pueblo se vuelca en ello, haciendo que la villa retroceda en el tiempo. Como novedad este año, la Asociación Cultural Dios Baco ha anunciado en su página de facebook que se celebrará el día 22 de este mismo mes la primera ‘Baco Race’.

Juana Ciega Razón

Esta será la novena edición de esta recreación de la estancia de Juana I de Castilla, más conocida como ‘La Loca’, en la localidad Arcos de la Llana.  La historia narra los 18 meses que pasó en el municipio mientras trasladaba el cadáver de su marido, Felipe ‘el Hermoso’. La representación recuerda los primeros desprecios de su marido o cómo su padre le arrebata a su hijo, el infante Fernando.

Cronicón de Oña

Esta famosa representación lleva celebrándose desde 1988 y en ella participan más de 140 personas, la inmensa mayoría vecinos del pueblo. En el Monasterio de San Salvador de la localidad oniense se relata  el origen de Castilla y el del propio templo con personajes como Fernán González, Sancho el Mayor de Navarra, Doña Urraca o el Cid Campeador. El espectáculo de luces y sonido, la interpretación o la compañía del panteón real y condal hacen de esta representación una pieza única en el país. La representación se realizará del 13 al 17 de este mes y para ver el espectáculo se pueden adquirir las entradas desde ayer en la página web www.elcronicondeona.com, a través del número de teléfono 947 300 477 o en taquilla.

Fiesta Barroca de Lerma

Este fin de semana se podía respirar en Lerma aires ‘de la Corte’. Casi 200 personas participan año tras año en esta cita que, siendo catalogada como Interés Turístico Cultural, simbolizan las fiestas que el Duque de Lerma realizaba en el siglo XVII. Por aquel entonces España tenía dos realidades: riqueza y miseria. El Duque, con afán de ocultar esta decadencia, organizaba grandes fiestas en las que nobles e intelectuales disfrutaban. Esta época es el Siglo de Oro español, en el que muchos autores, como Lope de Vega, relataron en sus obras estas celebraciones. Talleres, teatros, pasacalles, bailes o incluso un mercado barroco son algunas de las ofertas culturales que se ponen a disposición de todo aquel que quiera ir a ver el festivo ambiente lermeño.

Batalla de Atapuerca

En el XX aniversario de la representación se busca que se le reconozca como Fiesta de Interés Regional. Esta actuación narra la guerra entre los hermanos Fernando I -Rey de León y conde de Castilla- y García Sánchez III ‘el de Nájera’ -Rey de Pamplona- que sucedió el 1 de septiembre de 1504. La historia se teatraliza en la llanura que se sitúa frente a la Sierra de Atapuerca y participan más de 200 personas de la localidad  con el mismo nombre para dar vida a dichos personajes históricos. Para conservar el mayor realismo posible, los trajes -realizados por los vecinos- son cuidados al máximo. Desde la página web oficial cuentan que «en la puesta en escena no se permite llevar relojes, colgantes o cadenas personales, ya que se quiere cuidar al máximo la sobriedad de la época». Además durante la jornada del domingo, en Atapuerca, se celebra un mercado medieval ambientado en la época.

Los 7 Infantes de Lara

En Castrillo de la Reina se recrea por vigésimo cuarta vez la tragedia de los Siete Infantes de Lara, más concretamente en  la iglesia parroquial de San Esteban. Los habitantes del pueblo son los responsables de esta obra que representa los acontecimientos sucedidos en las boda de Ruy Velázquez, señor de Vilviestre, y doña Lambra de Bureba, prima del conde de Castilla García I Fernández. Durante los festejos, Gonzalo González, el menor de los Infantes, mata a raíz de un incidente del juego a Álvar Sánchez, primo de la novia. Al tiempo doña Lambra convenció a su esposo para que tomara venganza contra éstos, ordenando así que los asesinasen. La obra se representa en castellano antiguo aunque el público puede seguir la obra al ser comprensible. Como novedades este año se han incorporado diez actores secundarios más y se ha puesto un servicio de autobús desde la capital con un coste de cinco euros por persona.