Medina mejora su movilidad con 8 calles más de sentido único

A.C.
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Además de reordenar el tráfico en el área ubicada entre la avenida de Bilbao y Villacobos, el Consistorio va a dotar de accesibilidad a la avenida de Vizcaya y Santo Domingo de Guzmán

Ocho calles nuevas de sentido único en Medina. - Foto: Fuente: Ayuntamiento de Medina de Pomar

Casi el 30% de los accidentes ocurridos el pasado año en el casco urbano de Medina -6 de 22- se concentraron en el área donde el Ayuntamiento ha decidido actuar con una reordenación del tráfico que busca aumentar la seguridad vial, mejorar la movilidad de peatones y vehículos y reordenar el estacionamiento. Este verano ocho calles, bien en su totalidad o bien en parte, van a pasar a ser de un solo sentido entre las avenidas de Burgos y Bilbao y el parque de Villacobos, una zona comercial y muy cercana al centro urbano. Una inversión de tan solo 14.300 euros ahorrará muchos sustos a los conductores que frecuentan estas vías, donde hasta ahora los vehículos podían aparcar a ambos lados y teóricamente circular en ambos sentidos, algo muchas veces imposible por la falta de espacio suficiente.

La reordenación, en fase de contratación y que tendrá un plazo de ejecución de un mes, dejará en una sola dirección la calle Briviesca, donde los atascos son comunes en su confluencia con la avenida de Burgos. Las calles Saturnino Rodríguez y Algorta, ahora en parte de dirección única, pasarán a serlo en su totalidad y las calles Arcentales y Paraguay, ambas de doble dirección quedarán con una sola. Todas estas calles son paralelas y las que las cruzan, como son Dalí, Pedro de Paz y parte de Príncipe de Asturias, también pasarán a tener un solo sentido. Con estos cambios, que quedarán marcados con señales pintadas en la calzada y nueva señalización vertical, los conductores también tendrán más tranquilidad a la hora de salir a la avenida de Bilbao, al no tener nunca que compartir la calzada con otro vehículo que pretenda entrar sin apenas espacio para ambos, así como en los cruces.

Para mejorar la vialidad en esta misma zona, la concejal de Urbanismo, Inmaculada Hierro, anunció que está prevista también una próxima mejora en todas las bocacalles citadas que salen a la avenida de Bilbao y que se dotarán de isletas que protegerán y darán mayor visibilidad a los peatones a la hora de cruzar la calzada.

Con la vista puesta en hacer una ciudad más amable, el Ayuntamiento está en fase de contratación de un segundo proyecto, esta vez para la mejora de la accesibilidad en el conocido como circuito del colesterol por la urbanización residencial Miñón, así como en la entrada al barrio de Villamar. En este caso la inversión prevista tiene un presupuesto de 82.000 euros, aunque Construcciones Newcom ha presentado la oferta más baja en 69.938 euros y si en los próximos días justifica la baja temeraria, se reduciría el coste en 12.000 euros.

La intención de la edil de Urbanismo con estas obras es que una persona en silla de ruedas o que empuje un carrito de bebe pueda circular por las aceras con rebajes que le permitan el acceso y sin tener que salirse a la calzada en ningún momento, como ahora sucede en algunos tramos de acera de Santo Domingo de Guzmán, tan estrechos que imposibilitan el paso. Todos se van a ensanchar a un mínimo de un metro y medio y se realizarán rebajes en más de diez intersecciones con las calles que salen a la avenida Vizcaya y a Santo Domingo de Guzmán.

Asimismo, se mejorará la accesibilidad de la acera de la avenida de Burgos en su confluencia con la calle Villamar, dado que su altura dificulta incluso el paso a los peatones sin dificultades de movimiento. Se rebajará y se pintará un paso de peatones hacia la plaza del Olvido. Todas estas obras serán financiadas en un 75% por el Fondo de Cooperación Local de la Junta de Castilla y León de 2021 y se enmarcan en los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030.