Con una población que ronda ya los 2.000 habitantes, y buena parte de ella joven, Arcos de la Llana se ha movilizado para atender las necesidades que puedan surgir en la localidad. La crisis de la covid-19 ha llevado a infinidad de empresas de la capital y provincia a firmar expedientes de regulación de empleo temporal (ERTE), que en muchos casos se prolongarán hasta Navidad, y pendientes aún de la evolución de la pandemia. A esa situación se suma el cierre de muchos establecimientos de hostelería y comercios, por lo que la lista de parados va engordando.
Arcos no es ajeno a esta situación y el Ayuntamiento ha decidido poner en marcha una iniciativa solidaria para ayudar a personas que puedan encontrarse en una situación económica delicada. De ahí que se haya creado una despensa solidaria, instando a los vecinos a aportar todo tipo de alimentos no perecederos o incluso, pero tampoco no importa que algunos tengan fecha de caducidad porque se presume que se entregarán pronto, por lo que todo es bien recibido.
La respuesta vecinal ha sido inmediata y ya se almacenan alimentos como legumbres, pasta, arroces, azúcar, leche, galletas, aceite, huevos... así como productos de higiene personal y de limpieza en el lugar habilitado para la despensa, que no es otro que la escuela infantil, ahora cerrada por la crisis, donde se van llenando las baldas y organizando la mercancía. Como curiosidad, el viernes se recibió un lote extraordinario, anónimo, adquirido en la tienda del pueblo.
La tarea no sería posible sin la colaboración de un grupo de voluntarios, que ya se constituyó al inicio del estado de alarma y que se ha ido incrementando, siendo ya unos 15 los vecinos que colaboran en esta causa y que también pasan a recoger los productos por las casas al anochecer, sin dejar de lado la atención a las personas mayores del pueblo que necesitan hacer la compra u otros recados.
Pero también se pueden llevar los alimentos y productos directamente a la guardería, ya que está abierta de 8 de la mañana a 2 de la tarde, explica el alcalde de Arcos, Javier Castillo.
Y apenas dos días después de instalar la despensa, ya se había entregado el primer lote de alimentos a una familia de la localidad, y hay alguna otra que ha llamado al alcalde al enterarse de esta campaña, en concreto una familia con hijos que ahora mismo está afectada por un ERTE, a quien también han llegado los productos.
El alcalde está preocupado por la situación en la que pueden queda algunos vecinos durante los próximos meses. «Ahora la gente cuenta con ahorros y tira de ellos, pero si la situación se prolonga, familias en paro pueden pasarlo mal», dice. En caso de que se dé esa circunstancia, ahí está el Ayuntamiento para ayudar a las personas o familias que lo precisen en estos momentos y con total discreción, matiza Castillo, que agradece a los vecinos que apoyen este proyecto solidario.