La Consejería de Sanidad informó ayer -por fin- de la distribución de los afectados de coronavirus por zonas básicas de salud. Así, se puede comprobar que en el programa informático con el que se trabaja en Atención Primaria (Medora), los médicos de familia de la provincia han registrado  como enfermas de coronavirus a 3.159 personas, de las cuales solo 604 han confirmado la infección por SARS-CoV-2 mediante prueba molecular. Es decir, menos de la quinta parte.

El resto se consideran afectados de la enfermedad del coronavirus (patología técnicamente denominada COVID-19) por sospecha, porque su cuadro clínico hace suponer que están contagiados. La consejera de Sanidad, Verónica Casado, destaca que esta enfermedad es de declaración obligatoria y que es importante tener registros de incidencia real, para aislar cuanto antes a esas personas y tratar de romper al máximo la cadena de contagios. Sin embargo, no oculta que este sistema de control puede estar sobreestimando «algo» el alcance de la epidemia, porque los médicos de Atención Primaria incluyen en el registro casos reales y potenciales por los síntomas que refieren (casi siempre tos seca, fiebre alta, fatiga y dificultad para respirar, pero no solo).

En estas páginas se detalla la información de Burgos capital y de la provincia.

(Más información y gráficos, en 40 páginas en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)