El alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, ha querido hacer balance de su primer año al frente del Ayuntamiento arropado de su equipo de 10 concejales en el parque Félix Rodríguez de la Fuente. Sin duda, unos meses marcados por alerta sanitaria derivada de la COVID-19 que se han tratado de sortear con ayudas a familias, comercios y hostelería.

También ha resaltado el regidor burgalés que en este tiempo se han licitado 27 inversiones por importe de 14 millones de euros, como la nueva escuela infantil Río Vena, la adaptación de paradas de autobús, la remodelación de Las Llanas, la compra de 5 nuevos autobuses, la redacción de proyectos para las reformas del polideportivo de San Pedro y San Felices y de la piscina de verano de El Plantío, o actuaciones en los barrios como San Juan de los Lagos o San José. "Hemos cometido errores pero son más lo aciertos. La COVID-19 lo ha trastocado todo. Nadie elige ser alcalde en estas circunstancias", aseguró. 

En este sentido, se ha mostrado "orgulloso" de los burgaleses a la hora de combatir la pandemia y ha recordado que la gestión llevada a cabo en la ciudad ha sido ejemplo y elogiada por otras administraciones. "Estoy muy orgulloso de los vecinos y vecinas de Burgos. Ha pasado lo peor y ahora toca combatir la crisis económica", subrayó tras elogiar la capacidad de trabajo de su equipo. 

Los retos a partir de ahora será luchar contra la crisis económica y tratar de ejecutar el presupuesto pactado con Ciudadanos.