El Ayuntamiento destina buena parte de su presupuesto a la prestación de servicios directos a los ciudadanos, 80,5 millones de los 197,2 previstos en el borrador de 2020, pero también aporta dinero a subvenciones a diferentes colectivos sociales o deportivos que llevan a cabo una importante labor. La previsión de cara al próximo año es destinar 6.774.868 euros a este cometido, lo que supone un 5,6% más (365.049 euros más).
Las ayudas se dividen en dos tipos. Las denominadas líneas que se llevan a cabo en concurrencia competitiva y las nominativas que están dirigidas a un colectivo determinado y, en general, se conceden mediante convenio.
En el primer caso están por ejemplo las ayudas destinadas a la promoción y el fomento del deporte (572.480 euros) o las ayudas a cooperación al desarrollo con 934.000 euros. También se incluyen en este apartado las ayudas de urgencia social ordinarias (552.240 euros) y las extraordinarias (44.180), así como también la ayudas para alquileres por desahucio (110.445).
En el ámbito del empleo destacan las de apoyo al emprendimiento (110.000 euros) o ayudas a personas en exclusión (35.000 euros). Como novedad en el borrador se han incluido ayudas por 250.000 euros para el Plan de Retorno del Talento Joven, una iniciativa del PSOE para que jóvenes que tuvieron que emigrar por trabajo regresen a la ciudad. Repiten las ayudas a los grupos musicales y asociaciones juveniles manteniendo la cuantía (21.000 euros), así como las subvenciones de Alcaldía (85.000 euros).
En cuanto a ayudas nominativas, se otorgan casi un centenar, la mayoría a colectivos sociales que realizan actividades o prestan servicios, Cruz Roja, Fundación Oxígeno, Cámara de Comercio, Federación de Asociaciones Empresariales, Banco de Alimentos o Autismo Burgos son algunas de las entidades receptoras.
Como novedades destacar una en Medio Ambiente con la Fundación Caja de Burgos para la puesta en valor y la divulgación de los jardines (13.000 euros), otra con la Asociación de Passive House con la que se pretende llevar a cabo un proyecto en esta materia en la biblioteca Gonzalo de Berceo (12.000 euros) o con la Federación de Hostelería (150.000 euros). "Se mantienen todos los compromisos con las asociaciones con las que se venía colaborando y con otras nuevas", señaló el concejal de Hacienda, David Jurado.
plan y ordenanza. El equipo de Gobierno está trabajando en la elaboración de un plan estratégico de subvenciones para organizar las ayudas que se conceden y establecer los requisitos y prioridades. Cada sección municipal está estableciendo sus necesidades y posterioremente se pondrán todas en común para elaborar el documento. "Hay secciones que casi no tienen subvenciones y otras que tienen muchas como la Gerencia de Servicios Sociales".
Paralelamente, se trabaja en la modificación de la Ordenanza 100, que regula las ayudas para adaptarla a la nueva Ley de Subvenciones y a las recomendaciones que ha realizado el Tribunal de Cuentas, que establece que hay que hacerlo por concurrencia competitiva o convenios. El concejal de Hacienda espera que pueda estar elaborada a comienzos de 2020.
20 ENTIDADES SOCIALES HAN TARDADO UN AÑO EN COBRAR
Una veintena de entidades vinculadas a la inclusión han pasado un año difícil, dado que algunas no han cobrado la ayuda municipal hasta noviembre y otras lo harán a lo largo de este mes.
Son aquellas cuyos convenios con la Gerencia de Servicios Sociales caducaron en 2018 y no había posibilidad de prórroga. Tampoco existía partida presupuestaria y no fue hasta mayo de este año cuando el PP y el PSOE aprobaron una modificación de crédito que permitiera firmar convenios nuevos en 2019 por la misma cuantía. Sin embargo, la firma se ha demorado. De los 20, se han rubricado 16, de modo que quedan otros 4. Todos suman un total de 926.944 euros.
Durante este tiempo han tenido que adelantar el dinero para los servicios que prestan. "Ha habido mucho retraso y han estado ejecutando sus programas adelantando el dinero", indicó la concejala de Servicios Sociales, Sonia Rodríguez.
El equipo de Gobierno advierte de que en el año 2020 se va a hacer una revisión de los convenios, dado que algunos necesitan estar mejor dotados económicamente y también han cambiado los servicios que prestan. "Tenemos también que dar la oportunidad a otras asociaciones nuevas que quieren entrar también, dado que suponen una estabilidad financiera aunque no son cuantías muy elevadas".
También podría haber cambios en el propio concepto. Las subvenciones nominativas no van a desaparecer pero se revisarán las que puedan adaptarse a la fórmula de concierto como establece la Ley de Contratos, en los que se tiene en cuenta la experiencia de la organización y los medios con los que cuenta.