El Juzgado de Primera Instancia e Investigación de Salas de los Infantes ha abierto una investigación por un posible delito de alteración de precios en concursos y subastas públicas en el Ayuntamiento de Barbadillo de Herreros, después de que un particular denunciara al alcalde de la localidad, Roberto Neila, por prevaricación y malversación de fondos. En concreto, le acusa de haberse adjudicado, junto a unos amigos, las batidas de la Junta Consultiva de la Reserva de caza durante los últimos ochos años, valiéndose de su cargo para manipular los concursos y obtenerlas a un previo muy inferior.

Según la denuncia, que ya está en manos del titular del juzgado salense, desde que accedió a la Alcaldía en 2011 el primer edil de Barbadillo adjudicó directamente a la cuadrilla de cazadores locales formada por él, por sus familiares y por sus amigos, las batidas concedidas por la reserva «sin ningún tipo de expediente administrativo». El denunciante le acusa, además, de vender invitar a personas de fuera del pueblo a las jornadas, por las que pagaban «verdaderos dinerales».

Después de seis años, y tras varias quejas de este particular y de un concejal del Ayuntamiento, el alcalde convocó una subasta a la llana para la temporada de caza 2018/19. El escrito registrado en sede judicial recalca que en dicho  procedimiento se presentaron seis picas que oscilaban entre los 14.760 euros y los 23.860, todas por parte de la cuadrilla de cazadores de la que formaba parte Roberto Neila. Para evitar que nadie más pujase, sostiene el particular, llenaron el salón de plenos de personas ataviadas con trajes de cazador para intimidar a otros interesados.

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