Joan Peñarroya compareció ayer bastante serio tras el palo que supuso la derrota in extremis contra el Valencia Basket y lamentó el mal último cuarto de sus jugadores a nivel defensivo. El  entrenador del San Pablo señaló ese aspecto y la debilidad en el rebote como las principales razones de la derrota. No obstante, recordó que aún siguen con vida y que lucharán por el pase a semifinales.

El técnico catalán reconoció ayer que su equipo abandonó el terreno de juego «cabizbajo» y que los jugadores están «jodidos» por la derrota. «Quiero que la plantilla esté ahora jodida porque no se nos tendría que haber ido este partido. Hemos dominado casi todo el encuentro», sentenció.

Sin embargo, sí reconoció que sus hombres sufrieron mucho en el rebote defensivo durante toda la noche: «Hemos tenido un problema muy serio con nuestro rebote defensivo: Nos han anotado 30 puntos de segundas opciones y eso nos ha matado y a ellos les ha permitido estar en el partido». 

Además, habló de la falta de contundencia defensiva en el último cuarto, en el que el Valencia Basket anotó la friolera de 36 puntos: «En ese final nuestra defensa es muy floja, aunque es cierto que han estado acertados.   Ellos han subido la intensidad y nosotros hemos perdido todas la luchas. Nos ha faltado  frescura para puntear esos tiros».

Partido histórico. Pese a la crueldad de la derrota, Peñarroya ya piensa en un «partido histórico para el club» y afirmó que van a ir a por ello: «No dependemos de nosotros al 100%, pero estamos en ‘semis’ si ganamos y gana Valencia. Estoy orgulloso del  mi equipo y el viernes tenemos otra oportunidad». 

[La crónica del partido de ayer y más reacciones, en la edición impresa de Diario de Burgos de este jueves]