Una furgoneta camuflada vigilará en Burgos el uso del móvil

I.E.
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La DGT inicia una campaña contra las distracciones, que están detrás de siete de los nueve accidentes mortales que se han registrado en Burgos este año

La Guardia Civil de Tráfico llevó a cabo ayer un control en el cruce de San Medel, en la N-120. - Foto: DB

La Subdelegación del Gobierno, la Jefatura Provincial de Tráfico y el Subsector de la Guardia Civil se han conjurado este año para poner coto a las distracciones, pues los despistes y la somnolencia se hallan detrás de siete de los nueve accidentes mortales que se han registrado este año en la provincia, con un total de 12 fallecidos. Esta semana se ha puesto en marcha una campaña especial de vigilancia para prevenir las distracciones y una de las principales novedades es que la Benemérita ha incorporado a su parque de vehículos camuflados una furgoneta (por razones obvias, no informa del modelo ni del color) para sorprender a conductores hablando por el móvil, manejando el navegador o encendiendo un cigarrillo. No solo circulará durante la campaña sino que se incorpora «durante un tiempo al parque de vehículos de incógnito».

Pedro de la Fuente, subdelegado del Gobierno, hizo un llamamiento a la «responsabilidad» de los conductores para evitar distracciones «con teléfonos, GPS, incluso la radio», que pueden derivar en accidentes. También subrayó la importancia de «respetar los descansos», de coger el coche «tras haber dormido lo suficiente» y de «no fumar». Recordó que la utilización de móviles y navegadores «son infracciones graves, que acarrean multas de 200 euros y la retirada de tres puntos del carne».

El jefe provincial de Tráfico, Raúl Galán, reconoció que este año «está especialmente preocupado» con las distracciones y con la mortalidad en las carreteras, pues el año pasado se registraron 9 fallecidos y en lo que va de este 2020, 12. Los despistes pueden ser letales, de ahí la importancia de «no coger el móvil si se va conduciendo, de programar el navegador antes de iniciar los viajes y de no fumar». Según estudios de aseguradoras inglesas, echarse un cigarrillo en el coche provoca un 5% de los accidentes. «En encender un pitillo se tardan 4 segundos, a 120 por hora ese tiempo supone muchos metros sin tener la vista en la carretera y sin ningún tipo de atención», explicó. 

Aunque los dispositivos de manos libres están permitidos, el jefe provincial de Tráfico recomienda no usarlos porque en una conversación «se pierde un 40% de la percepción de las señales y estímulos al volante». 

El capitán del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, Diego Pérez, incidió en que resulta fundamental «conducir con concentración, mirando y observando las señales, pues no reparar en una línea continua puede conllevar un accidente si se produce un adelantamiento».