Los jóvenes toman la palabra. Ayer quedó constituida en Burgos la plataforma Futuro para Castilla y León, integrada de inicio por tres centenares de ciudadanos, que se suman así a otras iniciativas en la comunidad, como Soria Ya o Teruel Existe, en Aragón, con el objetivo de trabajar para revertir la situación de la España vaciada.

La crisis de la pandemia impidió que la mesa redonda prevista para abordar el tema del medio rural y la asamblea posterior para constituir como tal la plataforma, se celebraran presencialmente, pero no que se llevaran a cabo vía on line. Así, ayer quedó constituida formalmente la asociación que a partir de este momento tiene por delante un intenso trabajo para que las oportunidades de desarrollo laboral y vital de los jóvenes de la comunidad sean una realidad.

Hasta Burgos se acercaron para coordinar la jornada Fran Olucha, de Salamanca, y Emilio Marful, asesor jurídico de la misma, de Ávila, que explicaron que por fin jóvenes castellano y leoneses, de distintas organizaciones y asociaciones juveniles, estudiantes, trabajadores...,  han dado el paso de ir de la mano para reivindicar un futuro para la región. Ellos quieren aportar su grano de arena para aportar soluciones que posibiliten que los jóvenes se queden voluntariamente en sus lugares de origen, lo que consideran un derecho, y no verse obligados a emigrar. Además nacen con la intención de servir de puente con otras asociaciones porque consideran que el mundo del asociacionismo de Castilla y León «está un tanto atomizado».  

Se definen como plataforma democrática, en la que todas las decisiones se tienen que tomar entre todos, y ya tienen experiencia porque muchos de sus integrantes vienen de movimientos juveniles y muy participativos e, incluso, sindicales; muchos de ellos ya se conocían por estudiar o trabajar juntos, aunque cada uno sea de una provincia diferente.

Para Un futuro para Castilla y León el objetivo principal es acabar por la despoblación del medio rural y de las capitales de provincia amenazadas por la falta de trabajo y posibilidades para sus jóvenes. Por ello, además de las reivindicaciones de infraestructuras, servicios, sanidad, transportes... reivindican una industria propia de Castilla y León y que se dote de más recursos económicos a la región, y que éstos se repartan por igual en todas las provincias.