El pasado fin de semana circuló por diferentes grupos de WhatsApp la fotografía de una serpiente que, al parecer, había sido vista en el bulevar. Concretamente en la zona del parque de La Nevera. Un mensaje que llegó a muchos ciudadanos y entre ellos al alcalde de la ciudad, Daniel de la Rosa, y al concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño. Lo que ha precipitado que varios empleados municipales hayan salido al encuentro del animal, aunque hasta el momento sin éxito.
Temiño confirma que los técnicos del Ayuntamiento han identificado que se trata de una víbora hocicuda y han expresado su «sorpresa» porque se la haya visto en plena ciudad ya que no es su hábitat natural.
El concejal detalla que la picadura de la serpiente «no es peligrosa» para los humanos «aunque sí hay que ir al hospital» para que la revisen los profesionales sanitarios. Se entiende que es complicado que pueda llegar a picar a una persona ya que se suelen refugiar entre la maleza, aunque es más fácil que pueda atacar a una mascota que pueda estar olfateando el lugar.
La búsqueda no ha tenido mucho éxito ya que, tal y como explica el edil, la complejidad radica en que estos animales, a diferencia de lo que ocurre con un avispero, se mueven y es más difícil localizarla. A esto se suma que desde el pasado fin de semana no se han recibido nuevas llamadas de vecinos que se hayan tropezado con la víbora.
Temiño explica que el Ayuntamiento también se ha puesto en contacto con el servicio de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León «para ver si con efectivos suyos se consigue dar con ella».
Una vez localizado el animal, el plan es que los efectivos de la Administración regional se hagan con ella y la trasladen fuera del municipio, en un lugar sin habitar.
La presencia de la víbora hocicuda en las inmediaciones de la capital no es extraña. Incluso es habitual en barrios como Cortes o Villatoro. Lo que no es tan común es verla en un lugar como el bulevar, tan integrado en el centro urbano de la ciudad.
Protocolo. Cabe recordar que el servicio de Urgencias del HUBU puso en marcha el año pasado el primer protocolo de actuación del país ante mordeduras de víbora, al constatar en diversos congresos estatales sobre toxicología que Burgos es la provincia en la que más casos se registran cada año. De hecho, en la temporada de serpientes de 2018 (se ven entre marzo y noviembre) hubo que atender a 13 personas por este tipo de envenenamiento, mientras que comunidades autónomas refieren menos de una decena de incidentes totales «en varios años». Y aunque lo habitual es que las reacciones sean leves o de gravedad moderada, la ausencia de tratamiento adecuado en las primeras horas puede conllevar un dolor crónico residual o incluso algunas dolencias más severas.