Comunidades de vecinos, con 'voz y voto' en pisos turísticos

C.M.
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El propietario que quiera segregar una vivienda en varios alojamientos para este uso necesitará la autorización de una mayoría de tres quintos. Todos deberán tener cédula de habitabilidad

Comunidades de vecinos, con 'voz y voto' en pisos turísticos - Foto: Patricia González

El Ayuntamiento quiere unificar los criterios para la concesión de licencias de viviendas y pisos turísticos ante las múltiples variedades que están apareciendo y que no están contempladas en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Algunos solicitantes llevan más de un año esperando una resolución a su solicitud al haber discrepancias entre los técnicos a la hora de aplicarles la normativa de vivienda o la hotelera y una de cada cuatro peticiones se echa para atrás ante tantas trabas administrativas.

El jefe del Servicio de Licencias ha emitido un informe en el propone que todas las viviendas que se quieran destinar a este uso deberán tener licencia de primera ocupación, cédula de habitabilidad o autorización municipal correspondiente, debiendo cumplir en todo momento las condiciones técnicas y de calidad exigidas.

De este modo, en el caso de que el promotor quiera segregar la vivienda y generar dos o más unidades de alojamiento turístico cada una deberá cumplir las condiciones de manera independiente para poder obtener la licencia de primera ocupación. Ello evitará que ello ponga en el mercado alojamientos de dudosa habitabilidad.

Esta distinción se debe a que en los últimos dos años están llegando al Ayuntamiento solicitudes de propietarios de pisos de muchos metros cuadrados que plantean dividirlos en varios alojamientos turísticos. Precisamente, según señala el jefe de Licencias en su informe, cuando se pretende obtener licencias ambientales y urbanísticas para destinar las que ya son viviendas o apartamentos en viviendas o apartamentos turísticos no se plantean mayores problemas sino cuando un piso ya existente se pretende segregar para generar nuevas unidades de alojamiento turísticos, que en el caso de estar todas en el mismo edificio y pertenecer a un mismo promotor darían lugar a apartamentos turísticos.

En este supuesto será necesario obtener el acuerdo favorable del conjunto de copropietarios del edificio a dicha segregación, tal y como establece el artículo 10.3 de la Ley de Propiedad Horizontal, dado que se trata de una modificación del complejo inmobiliario. La normativa establece que será necesario la aprobación por tres quintas partes con el objetivo de dotar a los vecinos de instrumentos para facilitar la convivencia y decidir sobre las actividades que tienen lugar en su comunidad.

También la fijación de las nuevas cuotas de participación y la determinación de las obras a realizar, en el caso de discrepancia sobre las mismas requeriría el acuerdo de los propietarios por idéntica mayoría. En algunos casos se necesita ejecutar una segunda escalera de evacuación en base al decreto de la Junta de Castilla y León que regula los apartamentos turísticos.

aparcamientos. Esta segregación provoca también un problema adicional como es la necesidad de acreditar la disponibilidad de plazas de aparcamiento vinculadas a la vivienda o a los apartamentos de uso turísticos. El informe del jefe de Licencias propone que en todos estos casos sea necesario acreditar la disponibilidad del número de plazas por cada vivienda o apartamento e inscribirlo así en el registro de la propiedad para evitar su venta de forma independiente.

La justificación de su resolución es que así se establece en el Plan General de Ordenación Urbana y con el propósito de evitar que las calles se llenen de vehículos que no encuentran sitio para aparcar. Existe la posibilidad de eximir de esas nuevas plazas cuando se dé interés público, como por ejemplo facilitar la rehabilitación de edificios en el centro histórico, pero es un supuesto no puede aplicarse a los alojamientos turísticos. El informe se estudiará hoy en una Comisión de Licencias Extraordinaria.

El Ayuntamiento ha tramitado 86 expedientes de viviendas turística con licencia ambiental desde 2017, de los que 23 se han echado atrás, y 15 bloques de apartamentos turísticos (500 plazas).