Hasta siempre, amigo Bienve

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Carta abierta de Javier Lacalle a Bienvenido Nieto

Lacalle, Nieto y Ángel Ibáñez, presentando en 2011 un proyecto municipal de construcción del Arena. - Foto: Luis López Araico

Fue en aquellos días de noviembre de 2013 cuando algo empezaba a inquietar a la familia, y fue ayer, catorce meses después cuando, en pleno trabajo municipal, Marta entraba al despacho con lágrimas en los ojos para darnos la noticia del fatal desenlace. Entre tanto, durante estos meses, he visto a un hombre luchador como pocos, con la sonrisa permanente y con un optimismo desbordante que se enfrentaba a la enfermedad y se aferraba a la vida.

Cuando escribo estas líneas, a las pocas horas del fallecimiento, solo puedo pensar en su familia, y en tantos y tantos amigos que deja por todos los sitios donde estuvo. Porque Bienve dejaba huella allí donde iba. Es difícil encontrar a alguien que no le tuviese cariño, es casi imposible encontrar enemigos suyos. El consenso, el cariño, la educación, el acuerdo, la cercanía y el apoyo a los más necesitados eran su forma de trabajar y vivir. Era, lo que en Castilla llamamos, muy buena gente.

Ahora me dirijo a ti Bienve, y veo cuantos sienten hoy tu marcha, amigo. El mundo del deporte, al que tantos años te entregaste, está hoy de luto. La docencia pierde a uno de sus mejores profesionales con cientos de compañeros que han tenido la suerte de trabajar contigo y tantos miles de alumnos como has formado, entre los que siempre tenías un cariño especial para tus “gitanillos”, como te gustaba decir, los burgaleses de etnia gitana a los que tanto conociste y por los que tanto te implicabas.

Bienvenido Nieto, durante la apertura de plicas de una feria taurina.Bienvenido Nieto, durante la apertura de plicas de una feria taurina. - Foto: Patricia González

Qué decir de tus amigos de la Casa de Europa, de la Casa de Salamanca y de tantas asociaciones en las que colaborabas desde hacía décadas ayudando en lo que podías. Qué decir de tu Partido político en el que asumiste todo tipo de responsabilidades y trabajos. Sin olvidar tampoco en estos momentos a la ciudad de Sevilla, a la localidad de Cabra del Santo Cristo o a Murcia con las que te unían esos lazos tan especiales.

Y dentro de tu vocación de servicio público, llegamos al lugar donde adquiere su máxima expresión, a la casa de todos los burgaleses, a tu Ayuntamiento. Han sido muchos años como consejero vecino en el Servicio de Deportes, primero, y como concejal y teniente de de alcalde después. Te has volcado en el mundo del deporte, en el área educativa municipal, y en esas relaciones institucionales que bordabas como nadie.

Has sido Bienve un gran colaborador, una persona entregada siempre a tus responsabilidades municipales a las que dedicabas todas las horas del día y tantos y tantos fines de semana. Incluso en estos meses tan difíciles para ti, seguías toda la actividad municipal hasta el último detalle, como me comentabas en mensajes varios y como tuve ocasión de comprobar en víspera de Nochebuena cuando, en la plaza Mayor, todavía me decías convencido que, si era necesario, venias al pleno de presupuestos de hace quince días. Ese eras tú, una persona entregada a la causa publica hasta el último momento.

Nieto, rodeado de ediles del Partido Popular antes de un Pleno del Ayuntamiento.Nieto, rodeado de ediles del Partido Popular antes de un Pleno del Ayuntamiento. - Foto: Alberto Rodrigo

Hoy amigo no te podemos decir adiós porque sabemos que siempre seguirás con nosotros, con tu gente, con tu ciudad a la que tanto querías, junto con tu patria chica de la sierra salmantina. Hoy Bienve te despedimos con el mismo cariño que tú nos has dejado en tantos años de convivencia contigo en los que nos has honrado con tu amistad.

Hoy te decimos hasta siempre, amigo. Burgos te debe mucho y no dudes que te estará siempre agradecido. Ha sido un lujo conocerte y disfrutar de ti. Nosotros, mientras tanto, seguiremos al lado de María Ángeles y de toda tu familia. Y yo cuidaré también de tus amigos Pablo y Diego, como les llamabas, a los que tanto querías y por los que siempre preguntabas y abrazabas. Descansa en Paz amigo. Te lo mereces. Te lo has ganado.