Así hubiera quedado Burgos con la bomba de Hiroshima

R.P.B.
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Una aplicación permite conocer las consecuencias de una explosión similar en cualquier rincón del planeta

Una aplicación permite conocer las consecuencias de una explosión similar en cualquier rincón del planeta.

El 6 de agosto de 1945 el avión bombardero norteamericano Enola Gay abrió su vientre de acero sobre la ciudad japonesa de Hiroshima para que la bomba atómica denominada ‘Little Boy’ la redujera a cenizas. Alrededor de 66.000 personas murieron, muchas de ellas desintegradas, y otras 70.000 resultaron heridas. Unas cuantas decenas de miles más se vieron afectadas por la radiación para el resto de su vida. Esta semana se han conocido testimonios de supervivientes a quienes aquella salvajada cambió la vida para siempre. 75 años después de los los hitos más terrible de la historia del siglo XX, una aplicación basada en Google Maps y desarrollada por la organización PRI permite conocer las consecuencias de la detonación de una bomba similar a la de Hiroshima en cualquier parte del mundo.

Si tomamos la ciudad de Burgos como epicentro, el resultado sería el siguiente: en 0,5 millas (unos 800 metros), el 90 por ciento de la población moriría por el fuego y la explosión; esto es, el casco histórico de la ciudad y su inmediato cinturón quedarían borrados de la faz de la tierra; en el radio de una milla (1,6 kilómetros), el 70 por ciento de las personas también fallecerían y todos los edificios quedarían destruidos por completo. Esto es, la ciudad quedaría arrasada prácticamente en su totalidad, ya que en un radio de 3 millas (4,8 kilómetros), todos los edificios serían destruidos de forma severa por el fuego que se extendería desde la Zona cero. Sólo los barrios periféricos se salvarían, y no todos.

10 kilómetros de onda. La onda expansiva alcanzaría hasta los 19 kilómetros, aproximadamente según recoge la aplicación creada para imaginar la hecatombe que una cosa así acarrearía en este caso al suelo bendito. Esto significa que todas las localidades incluidas en ese radio se verían afectadas por la radiación y sus edificios, aunque se mantendrían en pie, sufrirían en sus estructuras, según el cálculo de la aplicación.

Así, por el norte la onda expansiva llegaría hasta Ubierna y Santibáñez Zarzaguda; por el sur, entre Cogollos y Valdorros; por el este, la zona de los Juarros y la comarca de Los Ausines se verían afectados, así como las tierras de Muñó (Cavia, Quintanilla Somuñó) y de la carretera de León (Palacios de Benaver, Las Quintanillas) por el oeste.