Felix Grossschartner ha agradecido el "increíble trabajo" realizado por sus compañeros del Bora Hansgrohe para conservar el maillot de líder de la Vuelta a Burgos tras la disputa de una segunda etapa en la que "ha hecho mucho calor". "Mis compañeros me han mantenido al frente hasta los últimos kilómetros y con un trabajo en equipo como este ya estamos esperando a que llegue la etapa de mañana", ha declarado el ciclista austriaco.
En la subida al Picón Blanco, el vencedor el martes en las rampas del Castillo tratará de "dar lo mejor" de sí mismo, aunque reconoce que no es el "mejor escalador" y que en el Bora también está Rafa Majka. "Los dos haremos lo posible para lograr un buen resultado", asegura.