Enrique Ruiz presentó este viernes la dimisión como jefe del servicio de Endocrinología del HUBU, a través de un documento que remitió a media mañana a la dirección del hospital. El especialista explicó a este periódico que tomó la decisión al percibir «pérdida de confianza» por parte de la gerencia del complejo asistencial en cómo estaba gestionando el servicio;una responsabilidad que asumió hace más de 15 años y después de haber ejercido en Salamanca, Zamora y Palencia.
Endocrinología se suma así a los cuatro servicios que están pendientes de renovación de jefaturas (Radiodiagnóstico, Ginecología y Obstetricia, Oncología Médica y Anestesiología), aunque por distintas razones;mientras que en estos cuatro casos la medida se adopta como continuidad de un proceso de reorganización paralizado el año pasado por la pandemia, en Endocrinología viene forzado por la renuncia de Enrique Ruiz. De momento, tendrá que buscarse a un responsable de «urgencia».
La convocatoria de renovación de las cuatro jefaturas citadas (varias ya publicadas en el BOCYL), por otra parte, provocó quejas del Colegio de Médicos de Burgos y del sindicato médico CESM por la escasa puntuación que se daba al currículo (5 puntos sobre 100) y, tras solicitar modificaciones, han conseguido que la dirección del HUBU las introduzca;se supone que para los procesos que están ahora en marcha.
La dirección del hospital comunicó la renovación de estas jefaturas a la plantilla a través de un boletín interno, en el que detallaba la baremación que emplearía el tribunal para calificar los proyectos defendidos por los aspirantes. «Cinco puntos sobre cien para la experiencia era casi insultante», señaló el portavoz del sindicato, Fernando García Picón, antes de añadir que, la dirección del hospital se comprometió a modificarlo y a valorar el currículo con hasta 30 puntos. «De entrada, estamos en contra del proceso en general, pero creemos que la experiencia siempre debe tenerse en cuenta», añadió.
CESM ha manifestado siempre su disconformidad con las elecciones por libre designación, aunque, como es el caso del HUBU, la elección vaya a hacerse mediante un proyecto y ante un tribunal público. «Entendemos que la libre designación se presta a situaciones que no compartimos, pero dado que es un procedimiento legal y regulado, sostenemos que, al menos, habría que introducir cambios en la composición de los jurados», añadieron.
La dimisión de Ruiz se suma a las renuncias de otros tantos jefes de servicio y cargos directivos en el último año y medio, cada una con sus circunstancias.