La localidad ribereña de Caleruega acogió un año más la festividad del patrono de la provincia de Burgos, Santo Domingo de Guzmán, un evento que habitualmente atrae a decenas de personas, que aprovechan el momento para invocar al santo y pedirle ayuda en materia provincial.
El programa de actos, marcado este año por la pandemia de la COVID-19, contó con la presencia del presidente de la Diputación de Burgos, César Rico, acompañado de los vicepresidentes y portavoces de la institución provincial, que se acercaron hasta la localidad para asistir a la tradicional misa en honor al patrono. También acudieron el delegado de la Junta, Roberto Saiz, y el subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente.
Domingo de Guzmán Garcés nació en la Caleruega del Medievo en 1171 y murió en la ciudad italiana de Bolonia el 6 de agosto de 1221. Desde 1957, cuando en el pleno de Diputación provincial de Burgos se demandó a la jerarquía eclesiástica que realizase las gestiones necesarias para que Santo Domingo de Guzmán fuese reconocido como patrón de la provincia, cada 8 de agosto se recuerda la figura de un religioso que supo inspirar a algunos de los mejores pintores españoles y que fue canonizado 1234 por el papa Gregorio IX.