El presupuesto para 2021 de la Diputación provincial de Burgos será "prudente" y "complejo" por la disminución de los recursos financieros debido a la pérdida de capacidad de consumo de la sociedad como consecuencia de la pandemia de la COVID-19. Así lo avanzó hoy su presidente César Rico, quien compareció acompañado por el vicepresidente de la institución provincial, Lorenzo Rodríguez, para hacer balance de la gestión llevada a cabo durante el primer año de mandato.
En este sentido, Rico precisó que tras el verano se empezará a elaborar el presupuesto para el próximo ejercicio, si bien matizó que hasta el mes de septiembre el Gobierno central no les remite a las diputaciones "una estimación de las entregas a cuenta a futuro" porque, según enfatizó: "Nosotros no hacemos brindis al sol". "Queremos hacer un presupuesto lo más acertado", apostilló.
Así, explicó que las entregas a cuenta que hace el Gobierno a las diputaciones se basan en los impuestos que se recaudan en cada provincia por lo que "dentro de esta fórmula", dijo, se tienen en cuenta los impuestos del IVA, IRPF, Loterías y Apuestas del Estado, y Tabaco y Alcohol. "De ahí sale una fórmula que sale cuánto nos entrega a cuenta mes a mes", aclaró Rico.
Por ello, justificó este descenso de los recursos financieros a que debido a la COVID-19, "el consumo ha caído por lo que la recaudación del IVA también va a caer". A ello, añadió que "tres meses sin lotería" o la evolución de la economía "si los ERTE se convierten en ERE", que influirá en el IRPF, así como "la evolución en la venta de tabaco y alcohol", aunque matizó que "esto es lo de menos porque es el de menor porcentaje".
"Hay que ser muy prudentes a la hora de hacer las cuentas de 2021", enfatizó el presidente de la Diputación de Burgos, al tiempo que manifestó la necesidad de "priorizar" a la hora de hacer las cuentas del próximo ejercicio "aquellas cosas en las que se está trabajando, que son los municipios y las entidades locales menores" porque, dijo, "se tienen unos datos y se quiere incrementar exigiendo a la Junta una mayor participación en los centros residenciales de la Diputación". "Las cuentas de 2021 tienen y serán prudentes", concluyó Rico.
El presupuesto de la Diputación de Burgos para 2020 asciende a 115,7 millones de euros, un 8,2 por ciento más que en 2019.