El Ayuntamiento de Aranda quiere potenciar la atención que presta a los transeúntes que están en las calles de la ciudad, que hasta ahora presta Cáritas a través del convenio que se viene manteniendo con esta organización. "El servicio que tenemos conveniado con Cáritas se nos queda un poco corto en cuanto a recursos, porque hay personas que necesitan que se trabaje con ellas a más largo plazo", reconoce la concejala de Acción Social del Consistorio arandino, Cristina Valderas, que lamenta que "con algunos llevamos tiempo trabajando y no conseguimos que salgan de esa situación".
Para implementar el servicio de Cáritas, se quiere crear un espacio para que los trabajadores sociales puedan trabajar con estas personas, buscando dotarles de herramientas laborales y de integración para que abandonen la vida en la calle. Se ha elegido el Centro de San Juan, donde compartiría espacio con un centro de encuentro para personas mayores. "Queremos reformar todo el local de la calle San Juan, que también da a la calle Barcelona, que hasta ahora había viniendo utilizando solo la Universidad de la Experiencia. En la planta baja y en la primera, queremos darle un concepto de espacio de encuentro para personas mayores y para el trabajo con transeúntes", confirma Valderas.
Este proyecto tendrá cabida en el Presupuesto municipal de este año, aún en tramitación, y se completa con una subvención de 102.269 euros con cargo a los fondos europeos que ya ha gestionado la Junta de Castilla y León. "Tenemos que valorarlo con la arquitecta municipal para presentar el proyecto más adecuado", explica la edil de Acción Social, remarcando que aún desconoce el coste total de esta obras. En esta iniciativa también tendrá que solucionar el problema del acceso a la primera planta del inmueble, donde la zona municipal comparte planta con viviendas particulares. "Tenemos que mirar desde el punto de vista jurídico cómo podemos hacer el acceso porque con los vecinos, en su día, había algún problema para poder acceder desde el portal, habría que mirar cómo se puede solucionar", reconoce Valderas.
Junto a la subvención para este centro de transeúntes, el Ayuntamiento de Aranda recibe otros 61.134 euros para colocar un elevador en el CEAS de Agustina de Aragón para salvar unos escalones en su entrada y para acondicionar las salas que ocupa el programa Construyendo Mi Futuro, en el que se trabaja con jóvenes. La ayuda proveniente de los fondos europeos se completa con 20.000 euros para mejorar los talleres de animación comunitaria para personas mayores, a los que se les dotará de pizarras digitales y tablets para que los asistentes puedan desarrollar sus actividades de memoria, estimulación cognitiva o informática con una metodología más adaptada a las nuevas herramientas.