El Centro de Transportes Aduana de Burgos tiene muy claro dos de los proyectos que quiere ejecutar en los próximos meses con el dinero que reciba procedente de los fondos Next Generation que ha lanzado la Unión Europea. No obstante, se ha topado con la negativa del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) en su intención de ampliar la longitud de sus vías hasta los 750 metros, lo que permitiría recibir trenes mucho más largos y, por ende, que carguen y descarguen más vagones en cada servicio.

Justifica el Adif su decisión, según apuntan desde el CT Burgos, en que la estación de Villafría no se encuentra al pie de la vía general y sí al final de un desvío, situación por la cual descarta dar su beneplácito para poder aumentar la capacidad de las vías. El organismo burgalés ya ha recibido la respuesta del ente dependiente del Ministerio de Transportes, y aunque consideran que se trata de una cuestión compleja, no van a echar por tierra sus aspiraciones a la primera.

En el último consejo de administración de 2021 el tema salió a la palestra, y fue el alcalde, Daniel de la Rosa, el que animó a seguir insistiendo en este proyecto. La intención del CT Burgos es poder prolongar la playa de vías junto a la terminal de Villafría y permitir la entrada de convoyes de hasta 750 metros. En estos momentos la capacidad máxima que alberga esta instalación es de 500 metros, por lo que de conseguir el permiso por parte del Adif las repercusiones serían notorias.

Además de esa ampliación al pie del Puerto Seco, el Centro de Transportes Aduana ha preguntado al Adif la posibilidad de habilitar un ramal ferroviario en la ampliación que se está construyendo en estos momentos. Aunque es una infraestructura que no aparece en el proyecto inicial, la aprobación de los Fondos Europeos supone una oportunidad para recibir parte del montante que podría conllevar la ejecución de vías de 750 metros.

El vallado perimetral de esta nueva zona del Puerto Seco tiene una longitud de hasta 1.500 metros, por lo que una entrada para trenes no sería nada descabellada. Sea como fuere, se trata de una idea incipiente que aún debe madurarse mucho en los próximos meses.

Vías con capacidad para trenes de 750 metros son un rara avis en el norte de España. En territorios como Madrid o la zona del Mediterráneo sí que están más habituados a plataformas de estas características. Sin embargo, dado el boom de logística, muchas terminales se están interesando por las mismas. En la línea Monforte-León, por ejemplo, el Adif acaba de dar luz verde a la ampliación de siete apartaderos a esa longitud.