San Pablo afrontaba el partido ante Obradoiro con la imperiosa necesidad de ganar una vez perdido el colchón con el descenso y esa responsabilidad se pudo notar en un arranque en el que los gallegos se pusieron siete puntos arriba con el 6-13. Los azulones supieron reaccionar y al final del primer cuarto habían igualado el electrónico. Un nuevo arreón visitante les permitió abrir una nueva brecha en el inicio del segundo periodo,reducida a uno al descanso por el ímpetu burgalés. En el tercer cuarto, se vió una gran versión del equipo de Epi. Intenso en defensa y acertado en ataque para romper los esquemas visitantes, algo que se prolongó en el principio del último parcial. Obradoiro apretó y se puso a dos, pero en ese momento el acierto de Fisher y Thompson cerró un triunfo muy valioso.