Ha sido el primer intento, pero se ha quedado en eso. El colegio concertado La Salle continuará el próximo curso con clases por la mañana y por la tarde. Las votaciones para cambiar el horario a jornada continua, que se celebraron el jueves de forma presencial y desde el día 14 anticipada, no han conseguido la mínima participación para que sean válidas. El censo de padres y tutores legales es de 604, requiriéndose por ley el pronunciamiento del 66,66%. Lo han hecho 347, lo que supone el  57,45%, por lo que la consulta quedó sin efecto.

A pesar de lo ocurrido, la gran mayoría de los progenitores que sí que han participado en el proceso se ha manifestado a favor de la modificación, un 86,16% o 299 personas, mientras que un 13,25% o 46 se mostraron en contra y se registró un apoyo nulo, según la información facilitada por la Dirección del centro. Su responsable, Raúl Rojo, avanzó tras conocerse el resultado que se procederá a analizarán los datos con el equipo directivo y con el Consejo Escolar.

Rojo no descartó retomar la consulta en un futuro, realizando "otro tipo de sondeos" previos y teniendo en cuenta que llegarán nuevas familias al colegio en septiembre. No obstante, señaló que "aún es pronto" y reiteró que la propuesta para abrir el proceso este año partió de los padres, sin que exista "ningún interés más allá".

El cambio, en caso de haber logrado la participación necesaria, hubiera afectado a partir del próximo curso a los alumnos de Infantil y Primaria, ya que los de la ESO y Bachillerato tienen solo horario de mañana. Como no ha sido posible, se mantendrán las clases de 9 a 14 y de 15.30 a 17.30 horas. 

El centro ya intentó el año pasado realizar la consulta, si bien la solicitud fue denegada por parte de la Dirección Provincial de Educación al presentarse fuera de plazo. En su caso, resultaba necesario que se recibiera el permiso por parte de la institución religiosa de la que depende, los Hermanos de Escuelas Cristianas, una vez obtenido el visto bueno previo del Consejo Escolar y del Claustro de profesores. Se trata de uno de los cinco centros de la capital que no tiene jornada continua junto a Fuentes Blancas, Maristas, Jesuitas y Campolara.