El Consejo de Cámaras de Castilla y León ha paralizado la subasta de la Tesorería General de la Seguridad Social al abonar esta mañana, a las 10.24 horas, el importe de 32.678,26 euros que se le adeudaba por parte de la Cámara de Comercio de Ávila y por el que saldría mañana a subasta el edificio, tasado por la misma entidad en 1,5 millones de euros.
De este modo, se gana tiempo hasta la próxima subasta del juzgado de lo social por un importe de 434.777 euros, más las costas y gastos pertinentes, y posibilita recibir, desde el análisis pormenorizado, las posibilidades que barajen oficialmente tanto el Ayuntamiento como la Diputación de Ávila, ya que ambas instituciones están estudiando la propuesta del Consejo.
Cabe recordar que el órgano regional cameral ha informado a ambas instituciones de cuál es la deuda y los activos de los que dispone la Cámara abulense a fin de que se pueda dar una solución de futuro a la Cámara y que pueda partir de cero y tener viabilidad en el vivero de empresas que posee la entidad en el Polígono de las Hervencias de la capital, permitiendo, de este modo, contar con cuatro o cinco empleos dedicados a prestar servicios a los emprendedores y las empresas abulenses.
Igualmente, con este planteamiento, la Cámara tendría la posibilidad de optar a los 87.000 euros que le corresponden para el ejercicio de las funciones público administrativas encomendadas por la norma autonómica, a través de la Ley 8/2018 que regula las Cámaras de Comercio Industria y Servicios de Castilla y León y su Consejo de Cámaras, así como diferentes fondos europeos y autonómicos destinados a desarrollar acciones relacionadas con la formación y el empleo, el apoyo al emprendimiento y la competitividad empresarial, unos recursos que este año, de haberse encontrado al corriente de pago de las obligaciones tributarias y de Seguridad Social, hubieran alcanzado una totalidad de 200.000 euros, recursos de los que se benefician el resto de provincias de la Comunidad, así como la demarcación de Arévalo.
El Consejo destaca que "técnicamente, humanamente y económicamente ha llegado al máximo de sus posibilidades" e insiste en apelar a la responsabilidad, altura de miras de todos los grupos políticos con representación local y provincial y sensibilidad con el fin de que analicen si Ávila merece tener una Camara de Comercio que desaparezca o, por el contrario, que comience de cero para prestar un amplio abanico de servicios a emprendedores y empresas, de forma gratuita.