Asaltan cuatro domicilios en dos horas en Sinovas

I.M.L.
-

Los allanamientos se registraron el pasado viernes, entre las 10 y las 12 de la noche, y las viviendas elegidas son la residencia habitual de sus inquilinos, de las que los cacos se llevaron dinero y joyas

Asaltan cuatro domicilios en dos horas en Sinovas - Foto: M.A. Valdivielso

La oleada de robos en viviendas en Aranda y su entorno vuelve a centrar conversaciones y despertar la intranquilidad en los vecinos. Después de que hace menos de un mes se conocía la detención in fraganti de dos hombres de nacionalidad georgiana a los que se investigaba por estar implicados en el asalto a nueve pisos de la zona sur de la capital ribereña, ahora ha sido el barrio de Sinovas el objetivo de los cacos. Con un modus operandi similar, la noche del viernes hasta cuatro viviendas sufrían asaltos en los que el o los autores se llevaban dinero y joyas.

Los hechos se producían en un corto espacio de tiempo, a penas dos horas, entre las 22 y las 0,00 horas, y las viviendas atacadas estaban todas habitadas. "Son casas donde vive gente habitualmente y ni siquiera estaban fuera, menos uno que está de vacaciones, el resto estaban o en el bar o habían bajado a Aranda", apunta el alcalde de Sinovas, Miguel Ángel Gayubo, que relataba que los habitantes de los objetivos de los cacos se encontraron sus domicilios revueltos. "Iban a por un botín fácil de dar salida en el mercado negro, como las joyas, y dinero, sobre todo, por lo que es difícil que se pueda recuperar lo sustraído", lamentaba Gayubo tras confirmar que tres de las víctimas de esta nueva oleada de robos en viviendas ya habían interpuesto la correspondiente denuncia, mientras que el cuarto se estaba esperando a que llegase a Sinovas, al encontrarse fuera, para hacer lo propio. "Los miembros de la Policía Científica han estado toda la mañana recogiendo pruebas y huellas en los domicilios afectados", relata el alcalde sinovés.

Más allá de la inquietud que despiertan estos allanamientos de propiedades privadas en una población que no llega a los 200 habitantes, entre los vecinos se comentaba ayer la presencia durante la semana en las calles de visitantes foráneos. "Puede ser una casualidad, pero sí que han estado durante la semana pasada visitando las casas del pueblo ofreciendo poner alarmas de seguridad, no se sabe si tiene algo que ver, pero la gente está susceptible", reconocía Gayubo.