La Universidad para la Educación y la Cultura de Burgos (Unipec) afronta el próximo curso confiando en poder «remontar los problemas» acarreados durante el actual. Uno de los principales radica en el descenso de las matrículas, que han pasado de las 7.000 a las 3.375. Su directora, Maribel Bringas, ve demasiado optimista llegar a ese techo, si bien confía en poder alcanzar las 6.000 dependiendo de si la pandemia permitirá al centro recuperar su programación de conferencias, seminarios y salidas.
La inscripción para las actividades infantiles se abrió la semana pasada y ya cuenta con más de 500 solicitudes, un ritmo que el centro espera que se traslade a la de adultos, franja en la que más se ha notado la caída de alumnos por el miedo a la covid-19. Con el avance de la vacunación, Bringas espera que los estudiantes veteranos se reincorporen a las clases, teniendo en cuenta que se prevé un aumento de la ratio por aula al reducirse la distancia de 1,5 a 1,2 metros.
En cualquier caso, se mantendrá el número de plazas para el próximo curso (5.000) y la doble modalidad de asistencia online y presencial. Los bloques de actividades no variarán (tecnológico-laboral, artístico, físico-deportivo, humanístico-social, pruebas libres e idiomas) y se ofertarán nueve nuevos programas formativos. Se trata de japonés, historia del cine, canto lírico, acondicionamiento físico combinado y también personalizado, pautas alimentarias para una salud óptima, y programación y desarrollo de páginas web, a los que se suma en esta última área otros dos pero en modalidad solo telemática relacionados con el aprendizaje del programa Microsoft Office y las aplicaciones web.
Todo esto en cuanto a las iniciativas programadas hasta el momento, ya que según avance el ejercicio lectivo se incrementarán los cursos que se imparten a través de subvenciones que recibe la entidad. En este punto, la directora de la Unipec recordó los cursos conducentes a la obtención de certificaciones profesionales, dirigidos a desempleados o trabajadores en situación de Expediente de Regulación Temporal de Empleo que «permiten aumentar las posibilidades a la hora de acceder a un trabajo o mejorar la situación laboral».
Bringas subrayó en la presentación de la oferta formativa el «esfuerzo económico» que ha tenido que hacer el centro para adaptarse a la situación derivada de la pandemia y poder mantener el empleo. Por ello y a diferencia de años anteriores, este verano no se contemplan ninguna gran obra en la dotación de la calle San Pablo salvo un pequeño arreglo en el patio.