El próximo diciembre se cumplirá un año desde que el convenio sectorial estatal de industrias cárnicas caducó. Desde entonces han sido varios los encuentros entre patronal y sindicatos para tratar de acordar una renovación de las condiciones laborales, aunque por el momento las posturas están muy alejadas. Así lo confirman desde UGT y CCOO, que cifran en 3.000 los trabajadores burgaleses afectados por este marco regulatorio y que podrían ser llamados a la huelga de no variar la situación.
«Estamos ultimando una batería de medidas junto a CCOO que aplicaremos, si nada cambia, desde finales de noviembre», asegura Hilario Sancho, del sindicato UGT. Desde CCOO Marco Antonio Pérez tilda de «bloqueo total» por parte de la patronal el panorama actual y no dudan en hacer cuantas acciones sean necesarias para reivindicar sus derechos.
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