2.000 burgaleses emigran a carreras sanitarias en diez años

B.G.R.
-

La UBU considera que los datos revelan el déficit del campus en títulos de esta rama y afirma que «es el momento» de la tan solicitada Medicina. Seguirá trabajando para poder ampliar plazas en Enfermería

Nuria Moriana estudia Medicina en Santander.

Las palabras del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, el día de la apertura del curso académico de la UBU, el pasado 25 de septiembre, todavía resuenan en el campus. Sus manifestaciones urgiendo a abrir el mapa de titulaciones sanitarias, justificadas en la carencia de profesionales que ha destapado la pandemia, despertaron  la pregunta de si dejaba «alguna» puerta abierta a implantar grados vinculados a este ámbito, que la institución académica lleva años reclamando a Valladolid exponiendo su deficitaria oferta en esta rama y con la carrera de Medicina como centro de sus reivindicaciones.

La Facultad de Ciencias de la Salud solo cuenta con dos estudios superiores vinculados a la rama sanitaria, ya que Ingeniería de la Salud, implantado el curso pasado, depende de la Politécnica. Se trata de Enfermería y Terapia Ocupacional, ambos con límite de plazas en 60 y 65, respectivamente, que no dan abasto a la demanda existente. Porque esta es muy elevada por parte de los estudiantes, además de que se mantiene en el tiempo. Tal es así, que 2.000 jóvenes burgaleses se marcharon fuera de la capital en la última década para cursar enseñanzas de las que carece la UBU, según  muestran los datos del Vicerrectorado de Políticas Académicas obtenidos de las peticiones de traslado de expedientes de estudiantes que han hecho la EBAU.

(Más información y testimonios, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)