Aurora Lázaro

Plaza Mayor

Aurora Lázaro


Plazas sin música

08/07/2020

Este verano echaremos de menos en pueblos y ciudades la bulla de peñas y charangas y la jarana de las verbenas. Las aglomeraciones incontroladas de personas aumentan el riesgo de expansión de un virus que ha puesto el mundo patas arriba. Pero, igual que se han ido recuperando distintas actividades económicas siguiendo las recomendaciones sanitarias, también deberían aflorar más iniciativas para potenciar la cultura en la calle, aprovechando las buenas temperaturas, los días más largos y el mayor tiempo libre. Una ciudad como  Aranda, con parques junto a ríos y numerosas plazas por todo el casco urbano, trae ya de serie los escenarios. Lugares que se pueden delimitar con aforos sanitariamente seguros, con sillas, vallas y una buena organización de horarios. Espacios donde podrían actuar cantautores, dúos, cuartetos, pequeñas bandas, también actores, magos, monologuistas, dando una  oportunidad a los artistas locales.

Sin embargo, no se oye ni intuye nada. Las escasas iniciativas que surgen son privadas. Para más inri, la ciudad no va a disfrutar de ninguno de los quioscos municipales ubicados en tres atractivos parques. Uno lleva años cerrado para reformar, otro se adjudica en condiciones poco atractivas para la iniciativa privada, máxime con la que está cayendo y el tercero, si se logra adjudicar, será bien entrado el verano. Por ello no entiendo la polvareda de críticas hacia el único evento musical, de momento, del verano arandino: los conciertos Viva la Vida, que se están llevando a cabo también en otras 40 ciudades. Parecido panorama se respira en el resto de la comarca, salvo que la situación cambie.  Sin el festival de Clunia, (otra inexplicable decisión, porque el de Mérida sí se celebra), sin veranos culturales adaptados a la actual situación. No debemos conformarnos con terrazas y piscinas. ¿Faltan ganas e imaginación? Pues estamos hablando de cultura.