Juanma García seguía ayer en boca de muchos apenas unas horas después de salir de El Plantío coreado por el público y con el balón bajo el brazo tras su exhibición ante el Leganés. El sevillano repitió el domingo lo que por última vez consiguió Aduriz en noviembre de 2003 -marcar tres goles con la camiseta blanquinegra- y la leyenda del Athletic y de LaLiga le dio la enhorabuena a él y a su «querido» Burgos CF a través de Twitter.

El estadio que no olvida la huella que dejó el zorro donostiarra aquella temporada 2003-2004 hoy tiene al andaluz en un pedestal al que se ha encaramado a base de entrega, calidad y cada vez más gol. El 1-0 ante los pepineros, de hecho, es para enseñarlo en las escuelas de fútbol: a 60 metros de la portería contraria huele el fallo de un rival, le ataca y roba la pelota, conduce veloz, recorta al defensa que le sale al paso y define con pausa, engañando al portero.  

El '7' blanquinegro tiene mucha fe. Y contagia. A sus compañeros y a la grada. La hinchada se puso en pie para despedirle, pero poco antes ya le había brindado una tremenda ovación cuando corrió a presionar un balón en línea de fondo que cualquier otro hubiera dado por perdido.   

Juanma aprovechó dos asistencias de Matos -que brilló en el carril izquierdo- para firmar un triplete ante el Leganés con el que iguala a Valcarce como 'pichichi' blanquinegro. El berciano, por cierto, volvió a marcar -de nuevo de cabeza-, esta vez aprovechando una asistencia de Andy, que en su zurda tiene un guante.

El 60% de los goles del Burgos CF (16 de 27) llevan la firma de Juanma o Valcarce, hoy líderes de un equipo que con 32 puntos avista el objetivo de la permanencia, pero de momento no mira más allá.

«A Lugo, a ganar», expresó tras el último partido Juanma, que hace apenas un año parecía rumbo a Badajoz y ahora solo piensa en seguir sumando el sábado en el Anxo Carro.