Échame a mí la culpa. Albert Hammond.

Vosotros haced lo que os salga del cuarto oscuro, que ya nos echaréis la culpa a los ciudadanos de a pie.
Que en la industria alimentaria y de distribución generamos millones de toneladas de plástico que destruyen nuestros ecosistemas… pues 'chupao'. Os cobramos las bolsas de plástico que nosotros os dábamos 'gratis', y con el dinero que nos dais fabricamos más bandejas de plástico para envolveros una rodaja de piña o un plátano pelado para que no os tengáis que molestar. Si, generamos más residuos, contaminamos más, pero la culpa es vuestra, que os habéis vuelto unos cómodos.

Que en los sistemas de transporte, tan necesarios e imprescindibles para mantener un equilibrio en el desarrollo de las regiones, tenemos que favorecer a las grandes urbes…. sencillo. Reduzco la calidad y la frecuencia de los servicios hasta convertir un viaje en tren en una odisea y acabo clausurando la línea porque no la usáis. Y con lo que me ahorro monto unas líneas de alta velocidad, subvencionadas hasta extremos escandalosos, para que las grandes ciudades estén bien comunicadas. ¡Qué modernos 'semos'! (Sí, 'semos'). A la España vaciada, e incomunicada, añado, que le den. Ya pondremos un anuncio diciendo que ya haremos algo. 

¿La sanidad es un gasto que no quiero financiar? ¡Sujétame el cubata! Cierro servicios, cierro quirófanos, despido al personal y no contrato profesionales. Privatizo todo lo que sea privatizable, y lo que no también, obligando a quien quiera solucionar sus pequeños problemas de salud a contratar una póliza privada que, en el momento de la verdad, no le va a servir para salvar la vida. Y claro, acabamos cerrando o cediendo a la gestión privada de los hospitales porque la gente prefiere la sanidad privada. Una vez más... Culpa nuestra, que no optamos por lo público.

Tres cuartos de lo mismo con la educación, con las telecomunicaciones, con todo…

Nos han hecho, o pretenden hacernos creer, que somos culpables, ¿pero sabemos quiénes son los que nos han hecho sentir así?