Jesús de la Gándara

La columnita

Jesús de la Gándara


Bancos

06/02/2023

Las noticias sobre grandes ganancias de los bancos se suceden estos días con vehemencia. A cualquiera de nosotros, que, lo queramos o no, somos usuarios cautivos de los bancos, esas informaciones nos suscitan preocupación por que no las entendemos. No entendemos con qué ánimo se publican, si con el de elogiar su eficacia, su solidez y seguridad, o todo lo contrario, criticarlos, acusarlos, zaherirlos con escándalo. Por favor, os pido, compañeros de la prensa, que cuando habléis de ello seáis más explícitos.

Tengo varias preguntas. ¿Si ganan mucho es porque lo han hecho muy bien, o porque lo han hecho muy mal?. ¿Qué son, ángeles de la guarda que custodian nuestros bienes o leviatanes submarinos que los devoran? Depende del punto de vista, pero como no tenemos punto de vista, pues eso.

Otras cuestiones: ¿Si ganan tanto es porque nos cobran más de lo que realmente cuestan sus servicios, o es que los cobran pero no los prestan, que nos están, sencillamente, estafando? ¿O es parte de lo que ahorran cerrando oficinas en los pueblos y prejubilando a diestro y siniestro?

¿Y cuando un banco no gana tanto, o pierde, por qué es, es que es muy malo, un verdadero peligro para sus usuarios y trabajadores, o es que miente? 

En fin, el asunto es complicado y está muy oscuro, le da a uno por ponerse paranoico. Y todo porque nos dan noticias que no entendemos, al menos la inmensa mayoría de nosotros, usuarios obligatorios de los bancos, privados de la libertad de usarlos o no por decreto de estado. Pero lo peor es que los que deberían explicarnos todo eso, los que deberían protegernos de ellos, los gobiernos y expertos, no lo hacen. Así que oímos esas noticias y nos quedamos atónitos, es decir atontados, y no sabemos si sentirnos contentos porque nuestros ahorros son muy fecundos, o enrabietados por constatar que lo que ganan de más lo reparten en sueldos millonarios para sus directivos, en vez de pagar más impuestos o crear más puestos de trabajo.

En fin, lo mires por donde lo mires es como para volverse paranoico con los trasuntos bancarios, o, peor aun, constatar que somos verdaderos idiotas en manos de fuerzas oscuras y poderes plutocráticos, como son los emporios bancarios y las grandes multinacionales. 

Lo dicho, que no entendemos nada, salvo que el dinero al que le sacan tantas ganancias, es el nuestro.