Al final Yolanda Díaz, salvo milagro de última hora, irá sola a la presentación, hoy domingo, de su proyecto "Sumar". Bueno, sola no, le acompañan todos los grupos a la izquierda del PSOE menos Podemos. No ha sido posible lograr el acuerdo sobre las primarias abiertas que exigía Pablo Iglesias y la formación morada que, como tiene por costumbre, se ha enrocado en su postura, negándose a ceder ni un palmo de sus condiciones.

Fuentes internas de Podemos advierten de posibles efectos negativos de cara a las elecciones municipales y autonómicas; pero el trío que ostenta el mando con mano firme --Iglesias, Belarra y Montero-- no tiene por costumbre dar su brazo a torcer.

Prueba de ello son las recientes tensiones en el Gobierno con los proyectos de ley de los departamentos de Montero y Belarra que, pese a tener graves defectos en su elaboración legislativa, se han negado a modificar. "Podemos no se equivoca", podría ser su próximo eslogan de campaña, dada la obcecación con la que defienden sus propuestas.

Pese a reconocer que no sumar con "Sumar" puede hacerles perder ayuntamientos y Gobiernos autonómicos, esta última semana, en puertas de la anunciada presentación, por fin, del proyecto común, los contactos en pos de un acuerdo han brillado por su ausencia.

Pedro Sánchez, por su parte, inmerso en su gira internacional, ve con preocupación la ruptura de imagen de sus imprescindibles socios. No solo por los pactos municipales, si no porque sin ellos seguir en Moncloa es harto improbable.

Desde Presidencia del Gobierno se ha promocionado la figura de Yolanda Díaz, se ha vendido su capacidad negociadora frente al irredentismo de Montero y Belarra y su capacidad de aglutinar a la izquierda. Esta maniobra, que sabían con consecuencias, no ha hecho más que "enrabietar", aún más si cabe, a Pablo Iglesias.

A estas horas, la ausencia de Podemos en el acto electoral es mucho más probable que su presencia. Y la razón final tiene mucho mas que ver con los egos de sus protagonistas que con discrepancias políticas de fondo, Yolanda estará acompañada de Alberto Garzón (IU), Ada Colau, Iñigo Errejón (Más País), Monica García (Más Madrid), Joan Ribó (Compromís), además de representantes de Chunta Aragonesista, Alianza Verde y otros.

La próxima cita electoral va a marcar el paso de esta nueva coalición y posiblemente empuje a Podemos a ceder en sus "irrenunciables" exigencias y unirse como forma de sobrevivir. A no ser que Pablo Iglesias haya decidido que el futuro de los morados pasa por volver a sus orígenes en la calle y no en las instituciones...