David Hortigüela

Tribuna Universitaria

David Hortigüela


Mi querida Educación Física

10/02/2023

La evolución pedagógica que ha experimentado la Educación Física como asignatura en los últimos años es indiscutible. Actualmente está integrada en todos los currículos educativos, siendo muy elevada la producción científica existente sobre los beneficios fisiológicos, psicológicos, afectivos, sociales, emocionales y académicos que derivan de la misma. Sin embargo, llegar hasta aquí no ha sido nada fácil, superando postulados más tradicionales, basados exclusivamente en la medición de la condición física a través de test, para llegar a enfoques pedagógicos que permitan aprender a través de la corporalidad. Sin embargo, todavía existen muchos prejuicios y estereotipos sociales en torno a la misma, manifestados en comentarios, desgraciadamente demasiado habituales: «Vas a suspender hasta gimnasia», «¿Sólo has sacado un 7 en una asignatura tan maría?», «¿Pero que en Educación Física tienes que escribir?», «Educación Física es como recreo». Estos comentarios, que en muchos casos son avivados por actuaciones, intencionadas o no (incluso de otros compañeros docentes), hacen que todavía nos toque seguir remando y demostrando el incuestionable potencial de la asignatura. 

Y es que sí, en Educación Física se aprende, y mucho, siendo sus contenidos transferibles a la vida diaria e incidiendo directamente en el desarrollo psicoevolutivo del estudiante. La Educación Física, que si bien tiene pilares fundamentales como son la condición física y los deportes, es mucho más que eso. Es expresión corporal, es aceptación y respeto a los demás, es asunción de responsabilidades, es autoconcepto físico, es autoestima, es aceptación de uno mismo, es disfrute a través de la motricidad, es comprensión del funcionamiento corporal, es control emocional, es cuestionamiento de los estereotipos corporales, es medio natural… y todo ello, a través de infinidad de situaciones de aprendizaje. De ello se encarga un apasionado colectivo docente, que participa en diversidad de foros, redes sociales, congresos, seminarios… y que comparte, de manera altruista, lo que hace, con el único fin de seguir creciendo. Seguramente haya personas que lean estas líneas y que no se sientan identificadas con la Educación Física que ellas vivenciaron, recordando ese temido salto al potro en el que los menos hábiles se quedaban los últimos en la fila, sometidos de este modo a la presión de la mirada de los demás. Una pena, porque la Educación Física actual se fundamenta en principios sólidos de enseñanza, partiendo de la premisa fundamental de que todos y todas deben de tener experiencias motrices positivas en el aula.

Atendiendo a todo esto, en unos días comienza la asignatura de Didáctica de la Educación Física, del Grado en Maestro de Educación Primaria de la Universidad de Burgos. Esta asignatura, que llevo impartiendo 12 años, la cursan todos los estudiantes, independientemente de la especialidad (mención) que vayan a hacer después. En ella, realizamos prácticas, exposiciones de sesiones, debates, seminarios, lecturas, visitas a centros escolares… todo ello enmarcado en un cuestionamiento y reflexión constante, fundamentada en la necesidad de que el cuerpo, abordado de manera pedagógica, tiene que ser un objetivo prioritario de aprendizaje en la escuela. Soy consciente de la exigencia de la misma, ya que requiere de un compromiso elevado del estudiante desde el primer día hasta el último, pero es que hay que exprimir al máximo esta imprescindible asignatura, y que tan bien valoran los estudiantes una vez finalizada. 

Seguiremos demostrando, con evidencias de aprendizaje, la necesidad de más horas de Educación Física escolar.

ARCHIVADO EN: Estudiantes