Maricruz Sánchez

Plaza Mayor

Maricruz Sánchez


La dictadura del aquí y ahora

24/02/2021

Últimamente, son demasiadas las personas que me aconsejan: «disfruta el momento, no pienses en mañana». Es una filosofía que comparto y entiendo que esté más en auge que nunca, en mitad de una pandemia que está cercenando muchas esperanzas y aún más libertades. Pero ojo, por imposición, por sistema, de manera mecánica, ese disfrute me resulta más bien una dictadura del aquí y ahora.

Mi amiga Esther siempre dice que las dos somos personas muy disfrutonas. Cualquier pequeña cosa puede hacernos felices: un buen desayuno, un paseo por el campo, una puesta de sol o un amanecer, una charla, una noche de risas...hasta un soplo de viento en el momento adecuado nos hace vibrar y elevarnos como globos de helio.

Por eso, esa impostura constante del disfruta el momento, solo eso, no pienses más allá, me genera a veces un poco de ansiedad vital. Me hace sentir que, en el fondo, limita mi capacidad de experimentar en plenitud todas las sensaciones que me pueden suscitar las personas y las cosas. Y es que, no puedo soñar ni hacer planes, solo aprovechar un aquí y ahora efímero que a veces creo que me deja más vacíos en el alma que llenos. Si a eso le sumamos que, a algunos, nuestros padres nos han educado con la mente siempre puesta en el futuro, esta filosofía nos coloca entre la espada y la pared. 

Al final lo haces, disfrutas; y cuando pasa el momento, te obligas a no pensar, a no sentir más allá. Así, en cierto modo, crees que controlas las situaciones cuando, en realidad, lo hacen ellas contigo. Pero no pasa nada, es una estrategia de marca tan buena que me la tatuaría: disfruta el momento. La pena es que a mí siempre me gustó más soñar que vivir, porque hay sueños mucho más puros y auténticos que la propia realidad.