Hoy quiero hacer un llamamiento urgente a quien corresponda. Se hace muy necesario que nuestros representantes políticos suban el nivel de educación, de conocimiento y de responsabilidad durante su labor en los órganos donde deberían representar a los ciudadanos, al menos a quienes les hayan votado. Y en esto no hay muchas diferencias entre los distintos partidos, el nivel de los políticos españoles está por los suelos, yo me atrevería a decir que es el más bajo del casi medio siglo de la historia democrática española.

Y hago este llamamiento a la desesperada, porque no sé quién puede solucionar esto. Quizás sea un reflejo de la sociedad española y es lo que nos merecemos... puede ser, aunque no lo creo. Pienso que, en general, los ciudadanos somos más sensatos, más moderados y tenemos más claro qué cosas son más importantes (las de comer, en primer lugar). Nuestros políticos se enredan en asuntos ideológicos, en aspectos cuya prioridad es dudosa al menos y en debates estériles que no ayudan en nada a conseguir superar la crisis de precios y a marcar un rumbo que permita mejorar la vida de este país y de todos los que lo habitamos.

Aunque pocos lo hacen, contemplar las sesiones plenarias del Congreso de los Diputados, del Senado de España o de las Cortes de Castilla y León da, en muchas ocasiones, hasta vergüenza ajena. Falta de educación, ningún argumento, palabras soeces e insultos, argumentarios manidos... la verdad es que se hace duro hasta para nosotros, los periodistas, que ya estamos acostumbrados.

Por favor, suban el nivel, apaguen el ruido y trabajen para que España prospere. Todo lo demás déjenlo apartado y si no es posible, tiren para su casa.