Belén Delgado

Plaza Mayor

Belén Delgado


La vida siempre se abre paso

26/03/2023

El compositor madrileño Rayden se ha hecho un hueco en la música con sus letras de cantautor moderno, lejos del canto lánguido de otros tiempos y con textos que conectan con las mil sensaciones de las tribus urbanas modernas, aquellas a las que el 'perreo' o el 'motomamismo' les deja indiferentes. Si a sus 37 años ya era popular, desde el jueves lo es mucho más. En su pico más alto, a punto de sacar un esperado disco, va y dice que lo deja, que no va a componer ni a hacer más giras en su vida. No es el miedo escénico, ni una espantada como las que han dado algunos predecesores suyos incluso con más caché (Sabina, por ejemplo). Es algo mucho más hermoso, por lo humano. «No quiero volver a tirarme 20 días lejos de mi hijo». El jueves, antes de anunciar que cambia los micrófonos por las novelas (estrena la primera) acompañó a su hijo Diego, de seis años, al colegio. «Nada es tan importante: ni nosotros somos tan importantes», dijo tajante.

Unos días antes, el entrenador burgalés de Salas de los Infantes José Rojo Martín 'Pacheta' pergeñaba la alineación del Valladolid para su casi decisivo partido de cara a evitar el descenso contra el Espanyol. De repente se cayó de la titularidad uno de sus fijos en defensa: Javi Sánchez. ¿El motivo? A la vez que se encendían los focos en el estadio Zorrilla, la mujer del jugador se puso de parto. El jugador tuvo dudas. 'Pacheta' no. «Vete a estar con tu mujer. Aquí ganamos y perdemos, pero el nacimiento de la vida no tiene discusión alguna». El gesto del entrenador ha sido una de esas pocas cosas que se eleva por encima del ruido habitual del balompié y pone a todos de acuerdo.

En estos tiempos de astracanadas constantes. De parlamentos nacionales convertidos en zarzuelas del género chico para actores con el pelo tan teñido como sus descoloridas visiones de la realidad. O de Cortes regionales en las que todo un presidente de Castilla y León compone disimuladas 'peinetas' con cara de niño travieso para después negarlas (¿gesto involuntario, señor Mañueco? A lo mejor padece el síndrome de Tourette y no se ha enterado). Decía que incluso en estos tiempos, la vida y quienes la aprecian de verdad, se siguen abriendo paso.