Blanca García Álvarez

De aquí y de allí

Blanca García Álvarez


El Burgos tranquilo

20/04/2023

Siempre pensé que la provincia de Burgos era un oasis de paz, calma y tranquilidad. Quizás porque continúa siendo el lugar a donde voy cuando estoy harta del asfalto, las prisas y la vida moderna. En el pueblo hago la misma vida desde que tenía cinco años: despertar, la tarea, coger la bici, arreglar el pinchazo diario, comer el bocadillo de jamón mirando al campo, más bici, la comida familiar, la tontuna de media tarde, más bici, más tarea y más bocadillo (esta vez de Nocilla). Una vida imperturbable en un verano infinito da igual la época del año que sea.

Han cambiado pequeños detalles: conduzco, no como tanto pan y la tarea es, ahora, estudiar una oposición. Pero, en lo esencial, todo continúa como hace veinte años.

Con esta imagen desde la infancia era difícil no pensar en Burgos como un remanso de paz, con prados eternos y niñas que dan saltitos mientras quitan pétalos a margaritas. Yo sólo conocía -si acaso- los dramas vecinales, algún robo de tomates o el sermón de la misa del domingo.

Todo esto cambió cuando entré a trabajar en la radio. No había día sin un apuñalamiento, un delincuente que había huido desde Madrid, un accidente… De todo, para todos. «Sonríe, es Burgos», me dicen siempre irónicas mis amigas que lo padecen día a día y que no han compartido nunca mi idea de paz y felicidad.

Sólo en las últimas 24 horas, el Diario ha contado un tiroteo en Villagonzalo de Pedernales, una amenaza con cuchillo en un bar de Gamonal y un conductor huido, ebrio, drogado y con un neumático menos por la A-62. Por no hablar de la oleada de robos en los comercios locales de la capital o del jubilado y sus cartas amenazantes en conexión directa Miranda de Ebro-La Moncloa.

Ya dice nuestro refranero que en todos sitios cuecen habas y sabemos que no hay lugar en el mundo sin crimen. Pero quizás habría que comenzar a poner freno a las razones para estas rachas de violencia, robos y sucesos pintorescos en la provincia. Que vuelva el Burgos de las despedidas de soltero, en vez del Burgos con cartel de no dinero.