Fernando González Urbaneja

Cartas desde 44 leguas

Fernando González Urbaneja


Rehabilitar la cordura

30/03/2021

Adela Cortina es filósofa de profesión, ha leído y entendido a Kant, precisamente el filósofo universal al que se refiere el presidente de Caixabank (Goirigolzarri) como la persona a la que le gustaría sentar en el consejo del banco. Curioso que el mismo día, en distintos periódicos, dos personas a las que estimo mucho, se refieran a Kant, más aún en estos tiempos de ansiedades, banalidades, ignorancias y confusiones. 
Adela Cortina acaba de publicar un libro titulado Ética cosmopolita, en el que reflexiona sobre la sociedad en tono propositivo. De sus palabras me ha llamado la atención una de calado que anda en desuso: Cordura. Cortina alude a la cordura como virtud, y reclama la rehabilitación de la cordura, la justicia y la prudencia como requerimientos para conciliar la sociedad, para aprender de las crisis y resolver los problemas. 
Para la lista de problemas urgentes, tremendos, propone: la pobreza, las colas del hambre, las personas sin hogar. Se resuelven con amistad cívica (una idea de Aristóteles), con proyecto común y con ciudadanía madura. Todo ello alejado de la sociedad polarizada que domina el discurso político. Adela Cortina sostiene, a la vista de los hechos, que no hemos aprendido nada de estas dos últimas crisis. Una visión tan decepcionada como realista. Para verificarlo basta con atender unos minutos al contenido de la campaña electoral para ganar Madrid. 
Para explicar la voz Cordura el diccionario propone: prudencia, buen seso, juicio, y añade reflexión. Todos ellos conceptos de fácil entendimiento y más difícil aplicación. Ser cuerdo, dice Cortina, es ser razonable, lo cual pasa por escuchar, respetar y actuar por convicciones. 
Goirigolzarri, probablemente el mejor profesional de banca del país, una especie de Draghi a la española, en una de las entrevistas que ha concedido este fin de semana, hace gala de cordura y señala: La cohesión social es fundamental. Debemos preocuparnos de las desigualdades que en España están en 80% relacionadas con el desempleo. El reto aquí es educación y formación. Más claro agua de manantial.