María Jesús Jabato

Señales de vida

María Jesús Jabato


'Furor asfáltico'

11/03/2023

Gracias a la concejala podemita Arroyo, sabemos que el alcalde De la Rosa tiene «furor asfáltico», porque está peatonalizando, al mismo tiempo, en Gamonal, Lavaderos, Roma y Francisco Grandmontagne, y no hay quien dé un paso, ni quien aparque por aquellos lares. Es lo que pasa cuando llegan los exámenes y no se ha estudiado, o cuando asoman las elecciones y no se ha cumplido el programa, que hay que darse un atracón de letras, de galipó o de lo que sea para salvar el cinquillo, para no perder el voto.

Sabíamos del furor amoris de los clásicos, del amor pasional, a lo Romeo y Julieta, pero no del furor asfáltico, que deberá incluirse en algún diccionario con el significado de ímpetu preelectoral, o algo así, porque es costumbre de los alcaldes calzarse el casco e inaugurar obras al borde de la convocatoria a las urnas y hacerse la foto, claro, que la foto de un alcalde con casco da más votos que un mitin; obras son amores, y no buenas razones.

La concejala Arroyo ha sido didáctica y con dos palabras ha hecho ver que el alcalde De la Rosa no ha hecho la tarea y ahora le toca acelerar, pero los vecinos de Gamonal, que de tontos no tienen un pelo, ya se han dado cuenta de la jugada y de que les están dando el gato de las peatonalizaciones furibundas y de última hora por la liebre del malhadado plan de convertir la calle Vitoria en una avenida comercial, que era el proyecto estelar del programa socialista de las pasadas elecciones.

Gato por liebre. Mejor eso que nada, y mejor gato que rata, mejor gato que las ratas que campan por sus respetos en Venerables, «del tamaño de un chihuahua», según el espantado símil de los vecinos, que entre el botellón y los roedores viven en un sinvivir.

Vamos a cazar ratas, decía el Nini a su perra Fa en las páginas escritas por Delibes, porque el Nini y su padre, el Tío Ratero, vivían de vendérselas a las gentes convenciéndolas de que «fritas con una punta de vinagre, son más finas que codornices». Pero en Venerables no cuela que las ratas sean tal manjar y quieren ver el furor desratizador del alcalde De la Rosa, ahora que es presa de furores varios y está donde salta la liebre, o la rata, o lo que salte. Furor preelectoral. Y luego dirán que la vida de provincias no es entretenida.

mariajesusjabato@mariajesusjabato.com