La inclusión en el aspecto deportivo y la normalización en la vida cotidina son las dos claves de este proyecto que se inició en 2017 entre la Federación de Castilla y León de Baloncesto y la Fundación Intras (Investigación y Tratamiento en Salud Mental y Servicios Sociales), y que se prorrogó por un lustro más el pasado curso, para formar parte del programa Anotadores, donde algunas personas con malestar psíquico participan en la realización de las actas de los partidos durante la competición de baloncesto de los Juegos Escolares.

Así, Ana García, Rosa Domingo, Carmen Santamaría, Vanesa Rioja, Lorena Hernando, Irene Benito y Susana Barriocanal se encargan de guiar a Raúl, Miguel Ángel, Agustín y Roberto a inscribir los cinco iniciales y el resto de las plantillas, las faltas personales, contabilizar las canastas, iniciar o parar el cronómetro, etc, durante los encuentros  desde la categoría juvenil a la prebenjamín. Las cuatro personas con malestar psicológico acuden tres días a la semana más el partido a las clases teóricas.

«Esta actividad es muy exportable de cara al perfil que tenemos nosotros en la Fundación Intras de toda Castilla y León. Se ha iniciado aquí y también podría ser interesante para otras provincias. Hay cierto interés en Valladolid y Zamora, sobre todo, cuando organizamos el 3x3. El próximo año podríamos enfocarlo al panorama digital. No hay prisas, aunque ya hay gente que cuenta con su propio smartphone», asegura Chema Campo, promotor y gestor de este programa, además de entrenador de baloncesto. 

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A través de la Delegación Provincial de Baloncesto, que preside Ángela Alonso, y el responsable del área del comité de árbitros de Burgos, Fran Sardón, invitan a todos los colegiados a colaborar en «esta actividad, romper los estigmas, generar sinergias y  potenciar a través del baloncesto formativo la inclusión», apuntilla Sardón.