El capitán del Tubos Aranda Víctor Megías es, sin duda alguna, el mejor termómetro sobre el que medir el estado de forma del equipo ribereño en el día a día. Por garra y actitud, pero sobre por todo motivación, su punto de vista y ánimo suele coincidir casi siempre con el sentir general del club. También, con la inercia de éste sobre la pista.

Se acabó la espera. Habría ganas ya tras mes y medio de preparación, ¿no?

Pues la verdad que sí. Ha sido un mes de pretemporada duro, pero hemos trabajado bien y lo bueno es que hemos tenido muchos partidos que nos han servido para poder empezar ahora la liga en forma, así que estamos con muchas ganas de que arranque esto y de que el balón eche a rodar.

¿Cómo ve al equipo? Parece que ha hecho bien los deberes pese a haber incorporado a diez jugadores nuevos.

Hemos sabido conjuntarnos y formar un buen grupo. Casi más una familia, diría yo. Y todo teniendo en cuenta además que han llegado cada uno en un momento diferente del verano. Pero aún así hemos sido capaces de combinarnos y, creo, que de llegar también en un buen momento de forma al inicio de curso.

¿Se respira buen ambiente? Es casi la clave de cualquier proyecto para el éxito.

Sí. Está claro que al final los entrenamientos, los viajes y las actividades, tienen que servir para formar un equipo, conjuntarlo y formar vínculos entre los jugadores. Nosotros hemos pasado muchas horas juntos y, sin duda, hemos conseguido crearlos.

¿Se ha marcado algún objetivo de inicio? Alguno de sus compañeros ya ha dicho que su prioridad será el día a día.

Ahora mismo no tenemos ninguno porque no sabemos en qué momento estamos. Tampoco sabemos a qué nos vamos a enfrentar quitando algunos equipos, así que es mejor ir preparando partido a partido porque la liga va a ser caótica. Yo por ejemplo en estos momentos sólo sé lo que tiene Guadalajara y es en eso en lo que estoy centrado.

Va a haber mucha igualdad y proyectos ganadores, pero sólo dos plazas de ascenso.

Exactamente. Sólo va a haber dos plazas y hay muchos equipos que están planteando de salida su candidatura. En ese sentido, la competición pondrá a cada uno en su lugar. También el trabajo realizado en los partidos. Ahí aparecerán quiénes son favoritos a ascender y quiénes no.

Si no hay recaídas éste debería ser el año de la vuelta a la ‘normalidad’ (público en los pabellones). ¿Puede ser esa la mejor arma del club?

Pues sí. Si vuelve el público va a ser como un jugador extra para nosotros. El año pasado en Asobal lo sufrimos mucho porque es la gente la que te da al final ese plus en casa cuando los partidos van empatados. No lo tuvimos por la mala suerte de la pandemia, pero este año creo que si todo va bien, lo notaremos.

Ya pueden, porque llevan más socios que el año anterior. ¿Cómo se valora eso con un descenso de por medio?

Muy positivamente. Si hay algo que se recuerda del año pasado es el partido con Bidasoa. Descendimos, pero todo el mundo aplaudía, y eso es lo que hace a esta afición la mejor de España.